~Monkie Kid~ 1️⃣

Cabello

Esto es para hikaru-fukawara

¡Muchas gracias por toda tu ayuda hasta ahora!

Espero que les guste~

-¿Qué te paso?- MK miro fijamente el cabello de Nezha, el cual se veía desordenado y enredado, con colitas y por lo que podía ver, algo de brillantina, también parecía que tenía algo de fijador en la parte de arriba.

-Tu amiga me paso- el príncipe hizo una mueca. La niña dragón lo había arrastrado y básicamente lo había obligado a sentarse, sin darle más opción, él quejándose mientras ella le hacía algo a su cabello. Terminó en desastre.

-Ufff, no me sorprende...- el menor sonrió ligeramente, dejando escapar un risa nerviosa. -...Mei no sabe arreglar el cabello, por eso lo lleva corto- su amiga siempre había sido un desastre cuando se trataba de su cabello, obligada en la infancia por sus padres a tenerlo largo, siempre lo tenía enredado y desordenado pero él la ayuda a en esos momento, hasta que ella decidió cortarlo. -¿Quieres que te ayude?- se ofreció amablemente, sintiendo pena por el sedoso y largo cabello ajeno, era lindo pero se veía como todo un desastre.

-...por favor- usualmente diría que no y lo intentaría por si mismo pero no tenia ganas de lidiar con todo aquello...y confiaba en el sucesor.

-Genial~- sonrió enormemente, haciendo un gesto para que el mayor lo siguiera hasta su departamento, indicando que se sentará. MK se le acercó con tijeras en mano, cortando las gomitas de las colitas, sintiendo lo que obviamente era fijador. Eso sería difícil de sacar. -Primero, tendrás que lavarlo- el príncipe obedeció, yendo al baño. Él volvió después de una hora, luciendo algo molesto, con una toalla alrededor de los hombros y su cabello mojado sobre este.

-El brillo no se quita...- hizo una mueca, se había visto en el espejo y a pesar de que no era tan notable como antes, aún podía ver el brillo entre su cabello.

-Si, eso tardará en salir- MK sonrió ligeramente, haciendo un gesto hacia una silla. Nezha simplemente se sentí, ligeramente tenso, sintiendo como el menor le secaba un poco el cabello con la toalla. Pudo sentir las pequeñas manos pasando por su cabello, deshaciendo nudo con suavidad y tranquilidad, incluso podía escucharlo tararear suavemente. Se relajo rápidamente, algo en todo aquello reconfortante y relajante de alguna manera, sin notar cuando MK empezó a pasar el cepillo. -¿Puedo hacerte una trenza, por favor?- el príncipe parpadeo ligeramente, adormilado.

-Claro- acepto sin pensar mucho, solo queriendo que el momento durará un poco más. Le traía recuerdos lejanos, de cómo un familiar le cepillaba el cabello suavemente y tarareando una canción. Sintió los dedos ajenos separando su cabello en partes pero presto real atención, cerrando los ojos, relajado y algo dormido.

-Terminé~- abrió los ojos ante eso, algo sorprendido, notando como el menor se acercaba con un espejo en mano. -¿Qué te parece?- preguntó con entusiasmo. Había pasado lucho tiempo desde que había hecho una trenza pero se había esforzado y había puesto mucho empeño para que se viera bien para Nezha.

-Oh...- parpadeo con sorpresa. La trenza se veía simple pero extrañamente lindo y llamativo, con un lazo color rojo para sostener todo final. -Me gusta...- sonrió ligeramente, la sonrisa del mentó agrandándose.