Capítulo 32: Ultimátum

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Disfrutad del capítulo como yo disfruto escribiendo!!!! Diez votos????

La casa de Boun se había llenado de actividad, y no de la que los recién prometidos desearían. 

-Lo siento mucho -Mark se acercó a Prem. - cuando os fuisteis, se siguieron peleando un rato.  Luego el padre de Boun le localizó por el GPS del coche y vio que estaba en casa.  Y papá me obligó a... a rastrear tu ubicación por el teléfono.

-Tengo que avisar a Boun y ya hablaré con papá.

-Entonces empezaron a pelear otra vez entre todos porque estabas en su casa y no estáis casados -puso los ojos en blanco.

-Y luego llegan e invaden mi casa como si fuera lo más normal -Boun se acercó a Prem y le abrazó -tranquilo, no es tu culpa. ¿Y mi hermanastro?

-Tu padre le ha obligado a quedar en el coche.  Dijo que hay cosas que un omega soltero no debe ver.

-¿Estamos en el siglo XXI o en el Medievo? -Prem frunció el ceño. Boun le abrazó y le cubrió con suavidad las orejas con sus manos.

-¡SILENCIO! -gritó usando la voz de alfa.  Sabía que con eso iba a provocar que los otros alfas sacasen el instinto, pero al fin y al cabo estaba en su casa.  Era su territorio, su omega y su hijo.

Que apareció llorando asustado.

-Nang, cariño, ven con papá.

El niño se acercó para que Boun lo cargara en sus brazos.  Le limpio las lágrimas.

-Ahora mismo papá tiene cosas que resolver.  ¿Puedes ser un chico bueno y entrar en tu cuarto con la puerta cerrada? Te daré helado después.

El niño pareció pensárselo, y al final obedeció.

-Está bien.  -Boun esperó a escuchar cerrarse la puerta. - Nadie, ninguno de todos vosotros tiene derecho a venir a mi casa, que por cierto, papá, me pago yo e invadirla en un momento en el que además mi omega y yo estábamos en un momento importante.

-Ya se nota.  Ocupados.

-Papá...

-Prem, nosotros no te educamos así.  Nos avisas de repente de que vas a casarte y cuando ya te han marcado, y además vienes aquí a su casa, como un cualquiera, y solo hay que veros para saber lo que estabais haciendo.  Todavía tienes los labios hinchados y vuestras caras...

-Acababa de ponerle el anillo -Boun estaba usando la voz gruesa de los alfas protectores.  Prem estaba nervioso, pero esa voz y su tacto al levantarle la mano y mostrar el anillo provocaron una respuesta en su cuerpo totalmente inadecuada en ese momento. - así que, solo falta casarnos.   Y por el, por Prem, quería darle una boda tradicional.  Pero si seguís así no perderé más tiempo y haremos una visita exprés al Ayuntamiento.

Se hizo un silencio incómodo.  Prem buscó acomodo en el hueco del pecho de Boun.  Mark se alejó de la pareja tratando de ocultar una sonrisa.

-¿De que te ríes? -le dijo su padre - vete. 

Mark levantó las manos y abandonó el apartamento.  Antes de irse, paso por el garaje.  Vio el coche del padre de Boun y se acercó.

Golpeó el cristal.  El hermano de Boun bajo la ventanilla.

-Lamento que te dejaran aquí, pero creéme que ha sido mejor no ver el espectáculo de ahí arriba.

-No están siendo justos con ellos.

-Ahora vamos a ser cuñados.  Trae, te daré mi número -le cogió el teléfono y se lo devolvió -por si necesitas cualquier cosa.

Le guiñó el ojo y se fue sintiendo una satisfacción extraña.

Boun cerró la puerta.  Se apoyó contra ella y se aseguró de que se habían quedado solos.

Prem estaba comiendo helado con Nang.  Sus padres habían dejado de discutir cuando Boun amenazó con excluirles así de la boda.  Sabían que una fractura así implicaría una mayor.

Aún así, el padre de Boun no se privó de decir la última palabra.

-Mi único hijo alfa y siempre has tenido que ser problemático como un omega -sus palabras destilaban clasismo y ranciedad - primero un hijo ilegítimo y luego te casas con el primer omega que...

-No acabes esa frase - advirtió Boun.

Su padre conocía a su hijo.  Se calló, pensando en que al menos su hijo menor era un omega bien educado, casto y obediente, por la cuenta que le traía.

Prem tuvo que aguantar una mirada de disgusto de sus padres pero no le importó mucho.

Al fin se había hecho silencio.  Mientras Boun recuperaba el control Prem sirvió dos boles generosos con helado y fue a por Nang.

Comieron juntos en silencio.

-¿Vas a ser mi otro papá? Papá dijo que os vais a casar.

-Si.  Seré tu otro papá.

-Bueno.  Pero no quiero hermanos.

-Eso lo decidimos los adultos -Boun le revolvió el pelo acercándose a ellos.

-El abuelo siempre dice que yo fui una mala decisión. ¿Es verdad?

-Ahora mismo estoy con las dos mejores decisiones que la vida me ha puesto delante.

El niño dejó el bol y se frotó los ojos.

-Vamos a lavar los dientes y a dormir.

Prem se movió pero Boun le colocó la mano en el hombro y tomó al niño en brazos.

-Espérame, amor.

El chico de la tienda de dulces||Completa|| ||BounPrem||Omegaverse||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora