Capítulo 45: La clinica con nombre de diosa

355 59 19
                                    


Para Prem la mitad de esa jornada pasó como en una nube, con la presencia protectora de Boun a su lado.

-¿Qué le vamos a decir a nuestros padres?

-Que hay que adelantar la boda.  ¿O prefieres esperar a dar a luz?

-¡No! Para nada.  Sabes cómo pienso sobre esas cosas.

-Hemos llegado.

Boun ocupó una plaza frente a la Clínica Phra Nang de Fertilidad y Atención a Omegas. 

-¿En serio?

-Ya, a mi también me sorprendió el nombre.  Pero tenía las mejores críticas y el nombre es bonito.

-Phra Nang, una diosa a la que se pide fertilidad.

-Cuando puedas viajar, te llevaré a conocer la cueva.  Aunque Nang tendrá que quedarse fuera, dicen que está llena de símbolos fálicos además de ofrendas para la fertilidad.

-Ni que nos hiciera falta.  Eres muy fértil.

Boun se rio.

-Me lo tomaré como un cumplido.  Y pronto visitaremos Railay y la cueva juntos.

Prem asintió.

-¿Estás nervioso?

Prem asintió de nuevo, esta vez con más vigor.  Boun le besó suavemente en los labios y salió del automóvil. Dio la vuelta y le abrió la puerta.

-Vamos, amor.  Todo irá bien.

Prem trató de imaginarse la playa en Railay y el sonido del mar.  Hacía mucho que no iba al mar.  Boun volvió del mostrador después de rellenar la hoja de datos.

-¿Algo que se me olvide?

Prem lo repasó.   Todo bien.  No tenía alergias.  Rellenó los espacios que Boun no podía saber.  Edad del primer celo, último celo, última relación sexual sin protección, síntomas que le hacían creer que podía estar embarazado.

Le entrego el formulario a Boun.  Se le pusieron las mejillas coloradas cuando escribió "soltero". 

Últimamente hablaba poco con sus amigos.  Estos solo sabían que acababa de empezar una relación con un alfa muy guapo y que la relación prometía.

Cuando se enteraran...

-Prem Warut.

Una enfermera de uniforme impecable salió a recibirlo.  Le pidió a Boun que esperase unos minutos fuera, pero que pronto le dirían algo.

Prem nunca había ido a ningún médico relacionado con la fertilidad. Le daba un poco de miedo.  

El doctor leyó su historial y le sonrió.

-Debería hacerse revisiones periódicas desde su primer celo.

-Ya...

-Tranquilo.  Ahora ya está hecho y todo depende ahora de su bienestar.  Dice que desconoce cuando pudo quedarse embarazado.

-Somos muy... fogosos.  Pero no recuerdo no haber usado protección.

-Por favor, quítese la ropa y vaya a esa camilla.

Prem se levantó.  Se dio la vuelta.

-Por favor, quiero que mi alfa esté a mi lado.

-Oh... de acuerdo.  Normalmente los omegas prefieren estar solos en la primera exploración.  Vaya tumbándose.

Prem se acostó y miró el techo.  La enfermera anterior volvió y le sacó una muestra de sangre.  El doctor y Boun volvieron.

Boun le agarró la mano.

-Primero voy a comprobar que está todo bien, mientras vemos que arrojan los análisis de sangre.

Cuando la camilla se inclinó y dejó a Prem en una postura totalmente indecorosa este palideció.  El doctor le calmó.  Notó un chorro frío y como el doctor le exploraba con un pequeño ecógrafo.

-Bueno. Al ser un omega hombre, el ecógrafo normal interno no llega tan lejos como para ver si hay un bebé.  Está completamente sano.  Ahora espere un poco.  Cuando vea los análisis le realizaré una ecografía normal si son claros y si son confusos, tendré que usar un ecógrafo interior más largo.

Prem miró a Boun.  Le había hecho daño, no mucho, pero daño.  Por primera vez deseó que el test fuese positivo.

No tardaron mucho.  La enfermera volvió y le mostró los resultados al médico.  Prem podía escuchar los bisbiseos entre ambos.

-Bueno - el doctor se giró hacia ellos - los resultados son indudables.  Está embarazado.  Ahora procederé a analizarle con el ecógrafo para averiguar de cuánto y... eh...

-¿No será dudoso?

-No, le haré una ecografía normal, externa.  Pero los valores de la hormona mUI por mililitro de sangre son de 550, unos 200 más de lo normal. 

-¿Eso que significa?

-Hagamos la ecografía y lo verá.

Boun se levantó.

-Voy a hacer una llamada para avisar de que llegamos tarde.  Tengo un hijo de una pareja anterior.

-Es un hombre fértil -dijo la enfermera con una sonrisilla.

Cuando Boun volvió, Prem estaba en la camilla en una posición normal y el doctor le estaba echando un chorro de gel en el vientre.

-Venga aquí, caballero.

Boun se acercó.  Le acarició la cara a Prem.

El doctor miró la pantalla durante unos segundos, como buscando algo.  Apretó un poco el vientre de Prem, algo que le molestó pero dio el resultado esperado.

-Ahí estaba.

-¿El bebé?

-Miren.  Este es su bebé.  Está embarazado de unas tres semanas.  Es normal que empiece a notar los síntomas.  Probablemente se volverán más molestos en las próximas semanas.  El nivel alto de la hormona era por esto. -señaló con la mano otra mancha en la pantalla hasta que vieron la forma - es un embarazo múltiple.  Son gemelos.

Prem y Boun observaron la pantalla.  Ahora veían las siluetas.

-En realidad son mellizos.  Es decir, dos espermatozoides fecundaron dos óvulos.

Prem abrió la boca.  Asustado.

-Yo...

-Todo irá bien -dijeron Boun y el doctor a la vez.

-Les imprimiré una copia de la foto y les enviaré por email un archivo de la grabación.  Pero antes... me gusta dejar esto para el final.

Tocó un botón y la máquina empezó a hacer ruido.  Y lo escucharon.  Rápidos y muy bajitos.  Dos corazones latiendo.

Prem sonrió aunque lloraba y escondió la cara contra Boun.

-Siento haber sido tan terco.

Boun se rio.  El doctor les dejo un momento para que Prem se aseara y vistiera antes de darles los documentos, la prescripción de vitaminas prenatales y consejos.

-Boun -Prem miró al alfa de reojo - yo...

-Estoy muy feliz.  Pero cariño, ahora si que tenemos que adelantar la boda.

El chico de la tienda de dulces||Completa|| ||BounPrem||Omegaverse||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora