Nang corría por la casa intentando esquivar a su padre, que quería que se pusiese la ropa para ir al colegio.
-¡No quiero! ¡Ayer casi no estuve contigo!
Boun suspiró. Había dos cosas que le desarmaban. Que Nang le mirara así y ahora que Prem le mirase así. Le hacía sentir el peor padre y alfa del mundo.
-Está bien. Nos tomamos un día libre del cole y la oficina. Iremos con Prem a la tienda a desayunar y luego te llevaré al parque. Pero en la tarde, tengo que trabajar. Desde casa. Comeremos con Prem y luego nos venimos y te pondrás a ver la tele y a portarte bien.
-¿Puede venir Gun por la tarde? ¿Con Mark?
-No lo se, cariño, su escuela es mucho más difícil que la tuya.
-Bueno...
-Si no vas a ir al cole, duerme un rato más. Prem también está dormido. Le despertaré y prepararé algo para desayunar.
Nang volvió a su cama sin protestar. Boun respiró hondo. Sin el saberlo, estaba disfrutando de un momento de calma antes de un martes caótico.
La puerta del cuarto de invitados se abrió y Mark salió recién duchado y con el uniforme de la Universidad puesto. Boun se acercó, le miró y valoró lo que veía.
-¿Dormisteis bien?
-Si, aunque ya tarde se sintieron ruidos desde tu habitación. Pero preferí no molestar.
Boun sonrió.
-Bueno, privilegios del compromiso. ¿Tienes las cosas más claras ahora?
Mark le miró a los ojos.
-Muy claras. Siento que ya no podría mirar a nadie más de esa manera. Anoche creí que combustionaría teniéndole tan cerca, pero logré contener mis instintos. Es tu hermano y tu casa.
Boun le apretó los hombros, y le sonrió esta vez sin rasgo alguno de sarcasmo.
-No se si es bueno o malo que os hayáis encontrado tan jóvenes, pero sabes que tu hermano y yo estaremos aquí.
Mark se sintió bendecido con esas palabras. Era reconfortante que un alfa como Boun le dijese eso.
Prem llamó desde su cuarto y Boun se disculpó.
-Iré a ver que pasa. ¿Puedes ir preparando algo para desayunar?
-Claro.
Prem estaba sentado en la cama, pálido y con aspecto de cansancio. Si no fuese porque sabía que no era así, parecía estar pasando por la resaca más horrible del mundo. Boun se acercó.
-¿Necesitas que llame al médico ?
-No. Ya me dijeron que iba a encontrarme así. Estos días ya no me despertaba bien, pero hoy...
-Espera. ¿Quieres dormir un poco más? Yo no iré a la oficina ni Nang al colegio.
-No, no puedo dormir. Tengo muchas náuseas.
-Pero puedes quedarte en casa...
-Iré a trabajar, como siempre. Hasta que esté un poco más avanzado y hasta que esté casado...
-Bueno -Boun sabía que no ganaría esa batalla. - quizás deberías dejar de contener las náuseas.
-No me gusta vomitar.
-Lo se, pero...
Un olor entró en el cuarto. Mark estaba cocinando. Prem recibió como una bofetada el olor y no pudo ni avisar a Boun.
-Lo siento...
-No pasa nada. Aguanta, por favor, mientras me quito la ropa sucia.
-No puedo -Prem corrió al baño. Boun se cambió de ropa y se puso lo primero que encontró. Una camiseta vieja y un pantalón de deporte.
Volvió al baño para acompañarlo en la penitencia.
Mientras, Gun salió tímidamente del cuarto de invitados.
-Buenos días.
-Buenos días -Mark le sonrió. -¿Y esa cara?
Gun se encogió de hombros. Frustración, insatisfacción, una alegría extraña al verle, ganas de abrazarlo.
-Ven. Acércate.
Gun obedeció.
-Tu hermano me ha dicho que está muy conforme con ésto.
-Define ésto.
Mark dejó la comida por un momento y le abrazó.
-Nuestra relación. Que seamos novios.
Gun dejó salir el aire.
-Pero no digas nada a nadie. No te lo he pedido adecuadamente. Es secreto hasta que encuentre el momento.
-Está bien.
Alguien llamó a la puerta del piso. Ese alguien había pasado por la entrada con permiso del conserje. Mark apartó a Gun después de darle un beso rápido en los labios. Boun salió del cuarto vestido con ropa vieja y diciéndole a Prem que se calmase.
Abrió la puerta y le sorprendió la presencia de su padre. En la ciudad. A esas horas de la mañana.
-De todas las cosas que ese resentido podía hacer no pensé que contratara a un detective privado. Y logró pruebas gráficas.
-Bueno... Prem y yo enviaremos un comunicado. Sabes que no me ha gustado nunca formar parte de la vida social. Y estamos prometidos.
-Estupendo. Mejor mira el teléfono. No solo se ha filtrado vuestra relación y la agresión de ayer. Grabaron un vídeo donde Prem se mareaba en la calle y una fuente anónima ha anunciado que está embarazado.
-Déjame explicarte.
-¿Por qué no puedo enterarme de una manera normal de que voy a tener un nieto?
-No vas a tener otro nieto.
-¿Cómo?
-Vas a tener dos más. Son mellizos.
ESTÁS LEYENDO
El chico de la tienda de dulces||Completa|| ||BounPrem||Omegaverse||
FanficBoun es un alfa muy atípico. Padre soltero y un hombre de mucho carácter. Prem es un omega que sueña que algún día conocerá a un alfa que sea el hombre de su vida. La tienda de dulces que ha decidido abrir le traerá a alguien muy especial. Boun...