Reencarne sin querer y además.... ¿Por qué las túnicas negras?

Mi nueva vida, más tranquila pero...

No paso mucho tiempo hasta que por fin pude salir de ese lugar apretado y húmedo, pero con esto se confirmaron mis sospechas y no eran una buena noticia.

Estaba reencarnado como un infante recién nacido.

-"Entonces reencarné... Maldita sea, ángel, ¿por qué?"-

Después de maldecir en voz alta, en mi mente claro está, me vi envuelto en incertidumbre. ¿Por qué? Bueno, reencarné en un mundo sin desearlo y no se que hacer.

Sé que muchos estarán en contra mía por no ver esto como algo "bueno", pero, por favor... no quise la reencarnación, y mucho menos con mis recuerdos. 

Ahora tengo miedo de descubrir en que mundo me encuentro y si es que es uno con el que me familiarice. ¿Por qué? Bueno, quizás la película "Efecto Mariposa" aclare tus dudas.

Solo un cambio en el pasado puede ocasionar desastres no deseados. ¿Quieres salvar a la madre de tu waifu para tu harem? Bueno, después los asesinos buscarán y matarán a la heroína principal por error, ocasionando la ira de los dioses y destruyendo el mundo. O ¿quieres descubrir tesoros increíbles antes que nadie o ser el protagonista de ese mundo? Bueno, después cargarás con la maldición que ellos tenían por no ser el 'elegido' y morirás de la forma más brutal posible. Esto, de paso, liberará los males del mundo en carne propia, ocasionando el Armagedón.

Bueno Muchos dirán: "Con un sistema, ¿no podrías saltarte esas cosas tediosas?" En cierta forma, sí. Un sistema aparentemente tiene la capacidad de moldear la realidad en beneficio del usuario o por lo menos puede arreglar los daños colaterales del efecto mariposa como tal, pero después de esa conversación con el ángel, o mejor dicho, con Gabriel, se me quitaron todas las ganas de tener dicho sistema. Todo eso de la energía del caos, muerte de mundos y que el sistema me impida reencarnar o posiblemente destruir todo lo que construí una vez muera....que desaparezcan de todo el multiverso en que yo interactuaste tras tu muerte... No sé, pero lo veo como un perder-perder.

Claro, entiendo la mecánica de "para crear, hay que destruir", pero no quiero esa sangre en mis manos. Además, con un sistema, la vida del reencarnado ya no es suya, sino del Dios que te lo dio. No sé, pero yo no quiero ser el perro faldero de alguien.

Lo único bueno que puedo decir de esta reencarnación es que no es en ningún mundo que conozca hasta ahora o, al menos, por lo que haya visto. ¿Por qué? Lo primero es que no estamos en la Edad Media, lo que descarta muchos mundos de magia y guerreros. Lo segundo es que la tecnología del hospital en el que me encuentro es de una época anterior a la mía, más o menos de los años 1970, según puedo deducir, ya que, no tengo mucho conocimiento de la tecnología de antes del 2000 y es lo que puedo decir con solo mirar un poco mis alrededores. Lo tercero, y más importante, es que no hay gente con túnicas diciendo cosas como "Este niño posee el físico del dios bestia, vamos a hacerlo mi discípulo," o "Toma esta píldora Ying Yang para que tu cuerpo se mantenga estable," o "Este niño será la ruina de mi familia, no heredó ninguno de los dones de nuestro linaje, hereje." Esto descartaría que sea un mundo de cultivo o de prácticas, como también se le conoce.

Eso si, esto no elimina la posibilidad de que sea un mundo de magia o de cultivo, porque repito es lo que yo he visto hasta y vivido hasta ahora. Existe la posibilidad que me equivoque y si sea un mundo de cultivo o de magia, ya que,  siempre tienden a ocultar estos hechos hasta un encuentro fortuito con algún ser celestial o un secuestro.

Bueno, nada de qué preocuparse, aparte del hecho de que mi nombre en esta vida es Kira... Sí, Kira, sin apellido aparentemente. ¿Estamos en un mundo donde la aristocracia todavía conserva el nombre de la casa?.... Puede ser, pero no he visto algo así hasta ahora