Un primer dia algo normal

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Bueno, mi estancia en el dormitorio fue... por así decirlo, silenciosa.

Los compañeros de cuarto que me tocaron fueron los más callados y que solo estaban concentrados memorizando lo que había en frente de ellos. Al principio traté de entablar una conversación, pero todo intento terminaba con un refunfuño o con una mirada amenazante.

-"Amigo... he visto hombres lobo abrir sus fauces en frente de mí, ¿acaso crees que solo ese ceño fruncido sirve para asustarme?"- fue mi pensamiento ante esto.

Así se fueron mis ganas de hacer amigos y solamente me limité a ordenar mis cosas para después acostarme.

No demoré mucho en conciliar el sueño, pero las luces no fueron de ayuda. La habitación estaba iluminada por una tenue luz azul que provenía de las ventanas. Aunque aún tuve algunas preocupaciones con las que aún tengo que lidiar.


Mi mañana comenzó temprano, como mi cuerpo estaba acostumbrado ya a despertar temprano no era necesario una alarma o algo parecido.

Cambiándome lo más lento y silencioso posible, me puse ropa para ejercicio, a la vez que revisaba las cosas que tenía en mi brazalete. Ahora podía ocuparlo sin problemas desde ahora y llevarlo conmigo, ya que por lo que puedo ver el castillo entero está absorbiendo energía mágica en grandes cantidades, lo que solo hacía que la concentración de energía mágica fuera mayor por los pasillos y los dormitorios dentro del castillo, lo que hace que los sentidos de percepción de energía mágica se vuelvan algo menos exactos o eso me paso a mi cuando lo intente.

Esto también me lo explicó Emilia una vez, que las escuelas mágicas son objetos mágicos inmensos que ayudan a las generaciones más jóvenes a absorber energía mágica para hacer que los núcleos maduren con mayor firmeza y rapidez.

Lo cual se traducía en que los niños hacían que sus núcleos maduraran en son de su enseñanza, pero solo dependía de ellos en alcanzar un nivel más superior.

Una vez que todo estuvo listo, me levanté sigilosamente de la habitación. Los otros estaban dormidos como troncos y creo que despertarán un poco más tarde, cuando iba bajando las escaleras de los dormitorios pude ver a algunos otros compañeros en sillas o en escritorios dormidos, junto con algún libro o papiro.

Tuve que pasar sin hacer ruido o cualquier otro sonido hasta la salida, algo de lo que ya estaba acostumbrado tanto como Ryu como Kira.

Al salir por la entrada a la sala común pude ver una estatua dorada cuidando la entrada.

Como en los libros, la clave para poder entrar es muy molesta, pues es una pregunta que se debe de responder. Lo bueno es que cada pregunta va acorde al año en que uno va, o sea si uno de primero quiere entrar debe contestar una pregunta de materia de primero, si es de cuarto una pregunta de materia de cuarto hacia abajo.

Lo malo es que es aleatorio en cuanto a qué materia consulta y cambia la pregunta según la persona que quiera entrar. Algo molesto el mecanismo para mi gusto, pero a la vez efectivo en cuanto a mantener una regularidad de estudiar en los estudiantes.

Después de eso fue fácil salir del castillo, literalmente no había nadie en los pasillos y no pude ver en ningún momento a la señora Norris. Además de que no me apetecía empezar mi travesía de búsqueda ahora, así que no fui a ninguna zona prohibida para primer año y salí por el corredor a la zona más alejada.

Después de eso salí a dar una corrida por la zona cerca del bosque prohibido, no me fui muy lejos del castillo como tampoco me adentré mucho en el mismo. El recorrido fue tranquilo y sin muchos problemas, aunque aún me sorprende la cantidad de seres con magia dentro del bosque como del lago oscuro.

Reencarne sin querer y además.... ¿Por qué las túnicas negras?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora