Capítulo 21 "Arma Letal..."

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SEIS MESES DESPUÉS...

KLAUS

Pasaron seis meses desde que la mocosa ha estado en la Asociación de Cazadores Nazi y dos meses en París. Era increíble ver la forma en la que se estaba fortaleciendo cada día que pasaba, pasó de ser una niña incontrolable y fuera de control a un Arma Letal. Esa niña era realmente un arma letal, que por supuesto que debía ser controlada para evitar el caos y así evitar que nos aniquilara.

La miraba golpear el enorme saco de boxeo negro y me daba cierta risa ver cómo una niña de seis años podía golpear ese saco con tanta fuerza tomando en cuenta que esa niña pesaba veinte kilos y el saco pesaba quince kilos más que ella.

Entonces sin esperarlo esa niña pateó el saco tan duro que este terminó por romperse por completo dejando treinta y cinco kilos de arena en el suelo de madera. Todos los que estaban entrenando en el salón de entrenamiento estaban boquiabiertos, nadie podía dar crédito que una niña como la mocosa haya podido romper un saco de boxeo de treinta y cinco kilos.

La mocosa tomó la toalla que tenía sobre su botella de agua y se secó el sudor, tomó su botella y salió de allí como si nada hubiera pasado. Me miró y sonrió burlándose de mí. Me contuve en ir tras ella y ahorcarla con mis propias manos, pero no podía hacer eso porque había gente de Stefan vigilándome durante los entrenamientos con Eliane.

En eso sentí una mano sobre mi hombro y era Mary.

Ella sonrió luciendo su ajustado traje de cazadora oscuro y su hermoso cabello estaba atado en un moño apretado sin ningún cabello fuera de su lugar.

—¿Sucedió algo?—Preguntó al ver el desastre que la mocosa había dejado.

Lancé un largo suspiro.

—La mocosa pateó el saco de boxeo con tanta fuerza que terminó por romperlo.—Mary se rió incrédula, levantó las cejas sorprendida.

—¡Vaya! Creo que estar con nosotros dos ya le está haciendo mal, pero es un mal necesario para Stefan.—No pude estar más de acuerdo con Mary, porque realmente ella tenía razón en ello.

Nos fuimos del lugar luego de asegurarnos de que alguien pusiera un nuevo saco de boxeo y limpiara la arena que había quedado tirada por todos lados.

Estaba contento con el progreso de la mocosa, pero realmente estaba cansado de tener que encargarme de que no la trataran de matar cada vez que ella hacia algo que no debía hacer en absoluto.

Mary y yo nos fuimos a dormir ya que era de noche y debíamos dormir un poco porque dentro de un par de horas teníamos una importante misión los dos en la Ciudad.

(***)

ELIANE

Estaba en mi aburrida habitación en París, Francia, la ciudad del amor. Mejor dicho la ciudad de la cursilería, odiaba estar aquí pero no tenía opción mi entrenamiento era la prioridad ante todo, lo peor fue que no pude despedirme de mis amigos pero afortunadamente he mantenido el contacto con ellos usando la magia.

Incluso Dakota me había pedido que le enviara una estatuilla de la Torre Eiffel, y le dije que lo iba a pensar. Por el contrario Gretel lo regañó por pedirme cosas inútiles que ni siquiera iba a usar, pero Dakota le suplicó Gretel y ella a regañadientes aceptó con la condición de que nada más la estatuilla iba a pedir.

Me tiré sobre mi cama que tenía el mismo diseño de la anterior en Suiza, realmente no había mucha diferencia entre ambas a excepción de que la sede en Francia era subterránea, era increíble pero realmente no quería estar aquí.

Habían pasado ya seis meses desde mi secuestro y no nunca tuve noticia alguna de que mis Padres me estuviesen buscando, realmente ya no quería seguir con este círculo vicioso esperando a que mis Padres dieran alguna señal de que me estaban buscando pero realmente ya no me importaba más y dejé de pedir favores al exterior.

Entonces opté por dormir un poco porque realmente lo necesitaba, estaba demasiado cansada como para seguir pensando en mi vida anterior, porque esa vida ya había dejado de existir, ahora vivía otra realidad, otra vida que no conocía en absoluto.

Y realmente comenzaba a disfrutarlo.

(***)

STEFAN

Pasaron dos meses de que mi Ángel se fue a Francia con Mary y Klaus. Extrañaba a mi Ángel pero no podía dejar que la encontraran, ella ya estaba en donde pertenecía conmigo y nadie más, así que durante los siguientes seis meses mi Ángel estará enfocada en su entrenamiento, mientras tanto yo me encargaría de que nadie se entere del paradero de Eliane.

Ella no necesita distracciones de afuera, ella debía estar enfocada en su entrenamiento y nada más, para cuando tuviera la suficiente edad me presentaría ante ella y de a poco me ganaría su confianza, para después hacerla mía y quedarme con ella para siempre.

Mientras tanto estaba en mi habitación solo sin nadie a mi alrededor mientras ordenaba mis pensamientos, cuando por un momento pensé en que no debí haber dejado que Mary se fuera a Francia porque realmente necesitaba de sus servicios. Pero para mi fortuna ella había dejado su agenda con un número telefónico privado con el que hice una llamada y luego de unos minutos llegó mi pedido.

De algo sirvió haber follado con ella una vez estando ebrios, hace dos años.

Abrí la puerta y entró una mujer de unos veinte años, de cabello oscuro y ojos cafés, mirada profunda pero seductora, rasgos delicados y sonrisa traviesa. Vestía un corto vestido negro sin mangas ni nada que cubriera sus delicados hombros, su piel era tan blanca como la misma nieve que por un momento me recordó a Eliana pero no me importó.

Ella entró y dejó su maletín a lado de la cama, y cerré la puerta con pestillo.

La mujer se quitó el vestido y mi mirada se posó en sus grandes senos y caderas, me relamí los labios y ella se acostó en la cama esperando por mí.

Me quité la ropa y ella tragó saliva nerviosa al ver mi gran paquete, me puse encima de ella, acaricié su cabello tratando de que se relajara y dije:

—No te preocupes si cabrá dentro de ti, tienes la forma perfecta.—Ella no dijo nada y nos comenzamos a besar desesperadamente.

La dejé de besar y mis labios se posaron en su cuello y su clavícula sacándole más de un gemido. Después tomé uno de sus senos con la mano y lo comencé a masajear y luego lo comencé a chupar y lamer, ella se puso tan roja de placer que tomó mi mano y la puso su sexo, negué con la cabeza y dejé su seno en paz, y le di la misma atención al otro.

Luego de unos minutos dejé en paz sus senos y besé cada parte de su cuerpo y finalmente llegué a su vagina que estaba preparada y lista pero antes introduje mis dedos dentro de ella comencé a mover mis dedos en círculos.

—¡Ahhh! ¡Sí! ¡Ahhh! ¡Sigue, no pares! ¡Ahhh!—Gritó suplicante.

Saqué mis dedos y después me puse a horcajadas, e introduje mi paquete. Ella se retorcía de placer y dolor absoluto incluso veía como brotaban lágrimas de sus ojos.

La seguí follando hasta que ella quedó sin aliento, me di cuenta de que era su primera vez y pese a que me gustaba el sexo no me gustaba hacerlo con una virgen que sólo sabe grita y jadear. Me gustaba hacerlo con una virgen que sepa lo qué es realmente el sexo, pero por lo visto ella no lo sabía.

Salí de su interior, me quité de encima suyo y le arrojé su vestido. Ella miró y entendió inmediatamente el mensaje, se vistió rápidamente y tomó su maletín.

Le di su dinero y dije:

—La próxima vez, no grites tanto sino espantarás a tu clientes. Vete ya.—Ella no dijo nada y se fue.

La Cazadora De La Noche: Los Secretos De Un Traidor...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora