Capítulo 59 "Arrepentimientos..."

23 1 0
                                    

Las llamas me quemaban hasta las entrañas provocando en mí un dolor tan intenso y atroz peor que el mismo infierno de puta vida, las llamaban se partían a la mitad mostrando mis recuerdos comenzando por cuando convencí al Padre de Eliana de matar a su nieto diciéndole que ese mocoso era el futuro Líder de la Tribu Luna de Cristal, además de ser el brujo más poderoso que era capaz de cambiar el mundo a su antojo, así que... al ver eso no pude evitar reír y decir:

—¿Enserio... creen que hablaré, así como así? ¡Eso nunca!—Al decir eso las llamas me quemaron por dentro, no era un fuego real el que estaba calcinando era más bien un fuego interno el que me estaba quemando por dentro, pero no iba ceder tan fácilmente debía resistir, debía sobrevivir a este puto sitio de mierda.

Entonces sentí como literalmente clavaban mi mano izquierda contra el suelo con una estaca de plata, después otra se clavó en mi pierna y la última en mis genitales, esa última dolió tanto que no pude evitar gritar, entre más me movía más se clavaban las estacas, sin embargo dicha experiencia me hizo recordar cuando Eliana se enfureció el día que la traicioné y ella en un momento de enojo e ira me clavó tres estacas en Los mismos lugares en los que tenía las mismas estacas. Sin embargo al levantar la mirada vi a Max en una versión más joven vistiendo su traje de cazador y con él llevaba una daga que sostenía del mango que era de un color oscuro con algunos detalles en gris. La mirada de Max transmitía odio, decepción y asco, entonces me miró a los ojos y dijo:

—Es tu funeral...—Levantó la daga sobre la altura de su hombro y cara, me apuñaló en el pecho haciendo que la sangre brotara y salpicara en su rostro, lo miré y me di cuenta de que el hecho de haber recibido esa apuñalada de su parte me hizo pensar en tantas cosas entre ellas que no debí haber traicionado a los Night Hunter's, tampoco debí haber revelado el plan de Eliana para vencer a los rebeldes y su Líder, y sobretodo... no debí haber engañado a Eliana, la única persona que me dio una mano en el momento más duro de mi vida en el que pensé que moriría, ella me enseñó lo que era ser querido por alguien que le importas, llevaba años sin sentirlo hasta que la conocí, su ternura y su sonrisa tierna me hicieron sentir vivo nuevamente.

En ese momento me di cuenta de que mi enemigo era yo mismo y nadie más, pero aún así no quise rendirme, más sin embargo... cuando quise levantarme sentí el peso de la muerte sobre mi cuerpo y vi oscuridad total.

(***)

Abrí los ojos y supe que había revivido, era extraño, era una sensación que no podía explicar, era como volver a nacer pero con la única diferencia de que todo seguía igual y nada había cambiado en lo más mínimo. Era muy raro pero así era la vida en el Mundo de los Malditos, lo que tiene que morir muere y lo que tiene que vivir vive para ser castigado, en efecto así era para individuo que se encontraba en una situación peor que la mía. Había visto a alguien siendo mojado con gasolina y después le arrojaban un fósforo y lo quemaron vivo, podía oír sus gritos de desesperación, de dolor y de agonía. Luego de unas horas su cuerpo terminaba calcinado por completo, lo único sólido y un tanto intacto eran su cráneo que tenía la mandíbula abierta y estaba prácticamente negro por el fuego.

Había visto muchos esqueletos, pero ver cómo era revivido aquel hombre que había pasado los primeros diez segundos de su vida siendo quemado vivo, ahora estaba de pie como si nada hubiera pasado, entonces pensé: "¿Así viviré toda la eternidad? ¿Cada día seré asesinado o torturado como toda la gente que maté desde hace más de una década?"

Era muy posible que eso pasara y realmente lo creí al ver a ese hombre siendo torturado por sus pecados, no era el cielo ni tampoco el infierno, sólo era un lugar donde nadie vivía ni tampoco morían. No sabían qué era realmente morir, no conocían la paz ni el descanso eterno. Nada existía en ese mundo lleno de llanto, arrepentimientos, ruegos y súplicas.

La Cazadora De La Noche: Los Secretos De Un Traidor...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora