—De verdad, Chat ¿Esto se va a volver una costumbre?
Marinette ya ni siquiera se sorprendió cuando vio a Chat llegar a su balcón, un rato después de que ella misma lo hiciera.
Habían tenido que lidiar con el sentimonstruo de piruletas de August hacia una escasa media hora.
Al parecer, Shadow Moth había aprendido que era más fácil controlar al sentimonstruo de un bebé que a un akuma bebé.—Supongo que no puedo alejarme mucho de ti —bromeó el rubio, agradeciendo que la chica no supiera quién estaba diciéndole eso detrás de la máscara —es lo que pasa cuando alimentas a un gato callejero, seguirá regresando —bromeó, aún encaramado en la barandilla de su balcón, justo a la izquierda de donde la ojiazul estaba de pie.
Marinette solamente se rió mientras el chico empezaba a frotar su rostro enmascarado contra su hombro, tal como una mascota.
"A veces, es un poco adorable" ella pensó, levantando una mano para darle algunos rasguños bajo el mentón, haciendo que él se inclinara hacia ella con facilidad, ronroneando "Solo un poco"
— ¿Ves lo que me haces, princess? —el rubio pretendió sonar acusador, pero no había más que deleite en su voz, cosa que casi hizo reír a Marinette, pero algo en su tono general parecía estar mal. No concordaba con su humor de siempre.
— ¿Hay algo mal, Chaton? ¿Algo que quieras decirme? —literalmente lo sintió congelarse junto a ella, así que se giró para mirarlo, descubriendo un poco de sorpresa en su mirada y algo de reserva en su postura, como si se estuviera preparando para ponerse la defensiva —puedo decir que hay algo diferente en ti, solo... si quieres hablar, sabes que estoy aquí para escucharte —ella le recordó suavemente.
El héroe felino se mordió el labio inferior, con una mirada un poco indecisa. Finalmente, abrió la boca —Yo- supongo... solo fue uno de esos malos días. Pero no es la gran cosa —se apresuró a minimizarlo, y ciertamente era la subestimación del siglo, tomando en cuenta que casi todo su almuerzo había consistido en una sesión con una Lila que parecía estar enojada con él por no haberla 'defendido' de su primo.
De hecho, su brazo todavía dolía, tras todo el tiempo que ella estuvo aferrándose a él como una boa constrictora y enterrándole ocasionalmente sus uñas.
Lo cual había atrasado la sesión más allá de lo planeado, puesto que la chica a veces ignoraba las indicaciones del fotógrafo para las fotografías, solo para estar más cerca de él. Lo que, sinceramente, lo traía físicamente incómodo y con los pelos de punta todo el tiempo.El toque mucho más gentil y cariñoso de las uñas cortas y redondeadas de Marinette rascando en la línea de su mandíbula lo distrajo de los incómodos recuerdos y el dolor fantasma.
—Todos tenemos un mal día de vez en cuando —la oji-azul suspiró, claramente con-doliente con el chico — ¿Es algo de lo que quieras hablar? ¿o es demasiado personal para contarlo bajo la máscara? —indagó suavemente. Subió la mano desde el mentón del héroe hasta su rostro, acariciando la mejilla, por el borde del antifaz.
Chat solo respondió negando con la cabeza —no te preocupes por mí, ma petit souris —le sonrió, apoyado la cabeza en la mano de su amiga —tu compañía es más que suficiente para hacerme sentir mejor —había un toque de coqueteo bromista, pero era mayormente honesto.
Cuando era Adrien, no podía evitar extrañar esta confianza y comodidad. Especialmente con lo lejos que Marinette parecía de él cada vez más.
Claramente no era lo mismo, pero su cabeza empezó a hacer un paralelismo con la situación de Nathalie.
Desde que la mujer empezó a mostrar signos de enfermedad, Adrien la había estado viendo cada vez menos. Lo cual, no hacía más que amplificar el sentimiento de soledad en su enorme casa.
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Un baile para El Día de los Héroes
FanfictionFélix Graham de Vanily tiene una cosa en la parte superior de su lista, en grande, negrilla y resaltado: Conseguir el segundo anillo gemelo de manos de su tío. Casualmente, su madre acepta un trabajo en París y es transferido a la clase de su primo...