Capítulo XXXIII: Él no vale la pena

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Narra ____

Hermosa...—susurró Matt entrando a la habitación y negué llorando. No había parado de llorar desde que él se fue y de seguro se escuchaba afuera, pero no podía evitarlo. El chico que amaba, el cual creía que me amaba también y con el que estuve dispuesta a darlo todo, al que me puse en peligro y la vida de mi hijo me había dejado. Estaba llorando por un imbécil que no valía la pena. Por un idiota que ve todo como un juego y que me lastima a cada segundo. No, no quería seguir llorando. ¿Pero como no hacerlo? Lo amo. Lo amo tanto que me sacrifique por él, di todo por el incluso puse la vida de nuestro hijo, bueno mi hijo por él. ¿Y el me paga así? ¿Qué le hice? ¿Por qué luego de estar bien, el me rompe el corazón? ¿Por qué? ¿Acaso no quiere ser feliz? El decía que yo era su todo, su felicidad, su más. ¿Qué paso? Yo sabía exactamente que paso. Mi hijo, el no quería esto. El mintió todas las veces que decía que seriamos una familia. Mintió al decir que quería ser el papa del bebe. ¡Me mintió todo el tiempo! Yo le di todo, me sacrifique por el incluso mate a una persona por él. ¿Y así me paga? Yo me había entregado en cuerpo y en alma a él, había dejado que tocara y me hiciera sentir reina del mundo ¿Y todo para qué? Para que solo fuera sexo. Acaba de llegar a una conclusión. Esto no se trataba de la vida que llevaba o de mi hijo. Se trataba que él fuera un maldito hijo de puta que le gustaba jugar con todos. El mismo lo dijo, pensó amarme, pero nunca lo hizo. ¡Fui un maldito juego para él! siempre será así. Además, el nunca dejo a Ciara. Mientras se acostaba conmigo, lo hacía con ella. ¡Maldita seas Justin! ¿Es que no hay ningún hombre que me coja enserio? Todos me botan como si diera asco, todos se burlan de mí. ¡¿Hasta cuándo?! ¿Hasta cuando seguiré sufriendo? Estoy harta de hacerlo. Pero hasta aquí. No iba a permitir que ningún hombre volviera a pisotearme. Esto no se trataba de mí, ya no era yo sola. Ahora tenía una personita que dependía de mí e iba hacer todo lo posible por sacarlo adelante. Hay muchas madres adolescentes que sacaron a sus hijos adelante solas, incluso mi mama lo hizo. ¿Por qué yo no podía hacerlo? estaba cansada de sufrir y sé que es mi culpa. Los dos hombres que he amado son unos malditos narcotraficantes que solo piensan en ellos. Yo no soy mujer de nadie, nunca lo seré. Tal vez es lo mejor ¿No? Ya soy mama y es hora de pensar en mi futuro y en cómo sacarlo en adelante. Justin acaba de morir para mí. Sera duro odiarlo, pero lo hare. El no merece ni una lagrima mas derramada por mí. — ¿Estás bien?—pregunto sentándose a mi lado y me limpie las lagrimas mirando la ventana.

—Quiero ver a mi hijo—pedí y este suspiro.

—Ahora mismo le están haciendo una evaluación—lo mire preocupada. Yo sabía que mi bebe era prematuro y que tuve una hemorragia, el doctor me explico todos los riesgos que puede tener mi bebe o yo. Así que debía cogerlo con calma, pero no podía. No cuando no tenia al papa del bebe a mi lado. No cuando no tengo a Justin a mi lado susurrándome que todo iba a estar bien. ¿Por qué? ¿Por qué simplemente no puedo ser feliz? No le he hecho daño a nadie, en cambio he sufrido un montón, pero nunca dejo de sonreír. Y eso era lo que debía hacer ahora. –No te preocupes, aunque fue prematuro, peso 4 libras, algo muy bueno—sonrió y asentí. —___—susurro y negué. Yo sabía que él quería hacerme sentir bien, pero nadie lo haría. Nadie podía curar la herida que tenía en el corazón. Había vuelto a creer en un hombre, a abrirle mi corazón, mi alma y él lo partió en dos. No le importo mis sentimientos, solo prefirió cortar la relación que teníamos.

—Quiero a mi bebe ahora—dije y este suspiro poniéndose de pie.

—Iré a preguntar—dijo saliendo de la habitación. Mire la pulsera que Justin me regalo y la arranque tirándola al piso. Esa pulsera para mi, ya no valía nada. Esa pulsera fue creada bajo promesas falsas que estúpida me las creí. Pero ya no. Era hora de vivir la realidad y esta era que sería yo sola con mi bebe. Me senté cómodamente en la cama con cuidado de no lastimarme la herida hecha por la cesárea. Nunca me imagine que tendría a mi bebe antes de tiempo. ¿Pero saben algo? A pesar de que Justin fue un maldito hijo de puta conmigo, volvería hacer lo que paso por él. Porque a pesar de todo lo amo, tan estúpido como suene, lo amo. La puerta se abrió de golpe y abrí los ojos como platos al ver a los amigos de Justin; Chris, Ryan, Derek, Chaz, y Alfredo entrar con globos y flores.

Trouble {Justin Bieber}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora