Trouble {Justin Bieber}

Capítulo XI: "Chicas como tú"

Narra ____:

—Nena...—escuché la voz de Justin y gruñí dándome la vuelta alejándome de su voz. Estaba muy cansada y apenas había podido dormir. —Princesa— susurro nuevamente tocando mi hombro y lo ignoré tapándome por completo con la sábana.

—Déjame—me quejé y sentí como me quitaba la sábana. ¿Es que no pensaba dejarme dormir? ¡No había dormido nada por su culpa!

—___ mierda—gruñó molesto y de mala gana abrí los ojos mirándolo. Me alarmé al verlo completamente pálido. ¿Qué le pasaba? Fruncí el ceño sentándome en la cama y este suspiró mirando la puerta. Seguí su mirada y me tensé al ver a mi tía con los brazos cruzados.

Mierda

—Tía—susurré con la cabeza bajada. Mierda ¿Qué hora era? Miré la mesita de noche y jadeé al ver que mi alarma se supone que hubiera sonado hace una hora. ¿Porque diablos no sonó? De seguro la apagué sin darme cuenta o pudo haber sido Justin. Aunque eso no importaba ahora porque estaba en problemas. ¡Mi tía iba a matarme! Yo le había prometido mantenerme alejada de Justin y mírenlo en mi cama. Joder.

—Tu tío quiere verte antes de irse, no te tardes—dijo antes de salir de mi habitación dando un portazo. Si que estaba molesta, pero luego hablaría con ella y le explicaría las cosas. Ahora no tenía tiempo. Rápidamente me puse de pie y corrí al closet colocándome lo primero que encontré. No me importaba que fuera unos jeans rasgados y una sudadera: tenía prisa. Fui al baño donde me lavé los dientes y recogí mi cabello en una coleta mala hecha. Me acerqué a la cama recogiendo mi mochila y miré a Justin. Este permanecía con el ceño fruncido mirando alrededor huyendo de mi mirada. De seguro estaba nervioso; podía ver lo incómodo y tenso que se sentía. No lo culpaba; si mi tía estaba aquí significa que mi tío también lo estaba y eso no era buena idea. ¿Qué hubiera pasado si hubiera sido mi tío quien hubiera venido a buscarme a la habitación? Mierda, debía ser más cuidadosa.

— ¿Quieres que te lleve? —preguntó y negué acercándome a él. No quería que estuviera así; él podía confiar en mí, nada malo iba a pasarle.

—No, mi tío me llevara—contesté y este asintió con la mandíbula apretada. Sonreí acercándome a besar sus labios y este gimió empujándome hacia atrás dejándome acostada. Reí al ver su oscura mirada y mordí mi labio. Estaba segura que él sabía muy bien lo sexy que se veía con el cabello revuelto y sin camisa. Lo sexy que se veía mirándome así y lo hacía propósito; de eso estaba segura porque el disfrutaba hacerme sentir nerviosa y sonrojada. —Debo irme...—susurré y ese asintió besando mi cuello haciéndome gemir. Jamás imaginé que el imbécil que me secuestró hace unas semanas estaría ahora mismo en mi habitación besándome, pero no me arrepentía. Me gustaba tanto Justin; era algo inexplicable. Me encantaba todo de él; incluso su lado bruto cuando solía morderme o jalarme para estar más cerca de él. Y estaba tan agradecida que me diera una oportunidad; a pesar de su estilo de vida, a pesar de lo peligroso que era, él me había dado una oportunidad e iba a demostrarle lo hermoso que era el amor y el gran ser humano que podría llegar a ser cuando se permitía ser el mismo. Él nunca había experimentado el amor; todo lo que había tenido había sido algo superficial y puro sexo pero aun así decidió darme la oportunidad así que iba a demostrarle lo agradecida que estaba con esa oportunidad.

—No hagas planes luego, pasaré por ti—susurró sobre mis labios y asentí besándolo. Gemí al sentir como su entrepierna apenas cubierta por sus bóxer se clavaba en mi vientre y acaricié sus músculos. Amaba acariciarlo y sentir sus músculos tensarse ante mi toque. —Joder nena...—gimió volviéndome a besar mientras sus manos subían por mi cadera llegando a mis pechos. Reí nerviosamente empujándolo y este gimió separándose. Sabía que por más que quisiera continuar esto, debía irme.  Mi tío estaba esperándome.