Trouble {Justin Bieber}

Capitulo Cincuenta y dos: "Vida eterna"

Narra ____:

Volví a mirar el cuerpo de Justin en el piso y negué sin dar crédito. No podía creer lo que acababa de pasar. No podía creer que todo esto estaba pasando. Negué incrédula muchas veces mientras sentía mi corazón romperse. Esto no estaba pasando. Esto no era real. Todo esto es un maldito montaje o un maldito sueño en donde pronto me despertare, ¿Verdad? Si, debe ser eso. Ahora mismo estoy soñando y en unos segundos me despertare en los brazos de Justin. El me dirá que todo está bien y que todo ha sido una maldita pesadilla. Entonces, el me callara con sus labios y me abrazara toda la noche consolándome. Volví a la realidad al ver como los chicos corrían hacia Justin. Solloce bajando las escaleras. Esto era real. Esto no era una pesadilla. Mierda, Justin estaba herido. Corrí hacia el cuerpo de Justin y solloce cogiendo su cabeza. No podía estar pasando. Mi Justin, no. Yo no podía perder a Justin, mi Justin no podía dejarme. No ahora que estábamos bien, no ahora que éramos una familia. ¡No podía dejarme!

—Justin—solloce golpeando su mejilla haciendo que reaccionara. Mire su cuerpo ensangrentado y solloce abrazándolo. Mi Justin no, por favor. Esto no puede estar pasando. Dios, esto no podía estar pasando. –Justin, por favor despierta—rogué moviéndolo, pero nada. El solo gemía de dolor. — ¡Una maldita ambulancia!—grite entre sollozos. Volví a mirarlo y solloce besando su frente. –No me hagas esto Justin, por favor despierta—solloce.

—Te-te a-amo—dijo entrecortadamente mientras cerraba los ojos. Los chicos se acercaron alrededor de nosotros mientras que Chaz trataba de calmar a Andrés que lloraba. De seguro presentía todo lo que estaba pasando.

— ¡Justin no!—grite—Justin, Amor por favor despierta bebe—rogué limpiando sus lagrimas. El también estaba llorando, le dolía mucho. Joder, maldita sea la vida. ¿Por qué tenía que pasarnos esto? ¿Por qué no podíamos ser felices junto a nuestro hijo? ¿Por qué? ¡¿Por qué?! –Hermoso—solloce viéndolo—Tienes que despertar bebe, nuestro hijo y yo te necesitamos, no puedes hacernos esto—solloce acunándolo en mi pecho como si de un bebe se tratara. –Por favor hermoso—rogué mirándolo, pero nada. Justin no podía moverse, le dolía mucho la herida. Subí su camisa en donde solloce al ver los agujeros de las balas. Aunque no eran muy profundos, habían tocado alguno de sus órganos. — ¡Necesito un paño! —grite desesperada.

—___—dijo Alfredo y lo mire con odio. Nadie me iba a decir que hacer. No llegaríamos a tiempo si llevábamos a Justin al hospital. Tenía que salvarlo, lo necesitaba. Era mi hombre, tenía que salvarlo sea como sea.

— ¡Un maldito paño!—grite desesperada y Ryan me entrego el de Andrés. Justin empezó a convulsionar y Ryan lo sostuvo mientras trataba de parar la sangre en sus heridas, pero era inevitable. Dios, esto no podía estar pasándome.

—Joder, Justin—dijo Ryan y lo mire. Rapido corrí hacia el rostro de Justin.

—Justin, Justin—golpe su cara, pero nada. Justin no respondía. Sentí mi corazón romperse y negué incrédula. Esto no podía pasar. No, mierda mi Justin no. –Justin, por favor—rogué, pero nada. Justin tenía los ojos cerrados. — ¡Joder, Justin despierta!—grite entre sollozos. Mi Justin no podía estar muerto. El no, mierda. No mi hombre, no el padre de mi hijo. El no podía estar muerto. Golpee varias veces su rostro, pero nada. Justin no respondía. — ¡No puedes hacerme esto Justin!—grite moviéndolo, pero nada.

—Lo siento ___—dijo Ryan detrás de mí y negué dándole respiración boca a boca a Justin. El tenía que responder. Justin tenía que vivir como fuera. —____—susurro.

— ¡Justin, despierta!—grite llorando. No podía ser, acababa de perder a Justin. ¿Cómo había pasado? — ¡Justin, mi amor!—grite abrazándolo. –No puedes hacerme esto, Andrés y yo te necesitamos—solloce y sentí como Alfredo me abrazaba por detrás.