Definitivamente Hogwarts comenzó a ser distinto desde ese día, la sensación que se sentía al caminar por los pasillos era extraña; por lo general dentro del castillo nunca hacía demasiado frío y aquellos ligeros escalofríos que llegaban a los alumnos comúnmente eran provocados por algún fantasma.
— De nuevo llegaremos tarde — gritó Narcissa del otro lado de la puerta — apresurate Louisette.
— Te he dicho cientos de veces que no tienes porque esperarme — la castaña se miró al espejo, la chica aún continuaba en su pijama y con el cabello completamente desalineado — ve a clases, llegaré algo tarde.
— Te esperaré — dijo — solo apresurate.
— Narcissa vete, ni siquiera sé dónde está mi uniforme — escuchó un suspiro del otro lado — juro llegar.
— Le diré a Binns que llegarás tarde, no me hagas quedar como una mentirosa — las pisadas de la rubia se alejaron y Louisette se dejó caer en la sillas frente a su peinador mientras un sonoro suspiro abandonaba sus labios.
No quería ser asesinada por Narcissa así que se puso manos a la obra, con suma pereza sacó su uniforme del armario y se dirigió al baño, quizás unas buena ducha caliente le ayudaría a entrar en su modo estudiante.
El agua caliente comenzó a caer del grifo y la castaña espero unos segundos antes de deslizar su cuerpo dentro, en cuanto el agua golpeó su espalda los ojos de la chica se cerraron, el agua se encargaba de desaparecer toda la espuma alrededor de su cuerpo. Cuando finalmente toda la espuma desapareció la joven cerró la llave y se enrolló en su bata de baño, miró su reflejo un par de segundos, específicamente sus ojos bajaron hasta la cicatriz de su clavícula y se mantuvieron ahí, antes de que sus dedos siquiera pudieran tocarla escuchó un suave golpeteo en su puerta que le hizo dar un salto en su sitio, sostuvo fuertemente su bata contra ella antes de abrir la puerta.
— ¿Tu qué haces aquí? — preguntó a la figura al otro lado.
— Lo mismo podría preguntarte, deberías estar en clase — respondió — ¿Que haces duchandote?
— Pensé que una ducha me ayudaría a aclarar las ideas antes de ir a clase — la mano del pelinegro subió hacia su mejilla, Louisette cerró los ojos ante el contacto.
— ¿Y que tal? ¿Ha ayudado?
— No realmente — confesó — ¿Cómo entraste? La puerta tenía varios hechizos de cerradura realmente buenos — dijo — y no estoy diciendo que seas malo con los hechizos, pero es extraño que hayas entrado sin hacer ningún ruido.
— Fui criado por ninjas — la chica se rió de comentario de su novio.
— Empiezo a sospechar que así fue — dijo mientras salía finalmente del baño — ¿No se supone que deberías estar en clase?
— Si, se supone — el pelinegro tomó asiento en el filo de la cama — pero estoy más preocupado porque la señorita asistencia perfecta no está teniendo asistencia perfecta.
— Es dulce que te preocupes por mí, pero estoy bien.
— ¿Y por eso estás poniéndote la playera por encima de las bata?— la castaña se dio cuenta de su error y soltó un bufido — me gusta como queda, creo que empezaré a usarla así.
— Estoy bien, esto fue solo por qué me estabas distrayendo — Louisette desató su bata y la arrojó hacia alguna esquina de la habitación, la mirada de Sirius la examinó de arriba a abajo — ¿Se te perdió algo cariño?
— No, pero a ti tal parece que se te perdió un botón — la chica bajó su mirada hacia los botones y efectivamente estaba mal abotonada.
— Maldición — sus dedos intentaron deshacer su pequeño desastre
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BELLATOR
FantasyDesde tiempos remotos los magos y brujas sangre puras han causado revuelo entre la gente, unos cuantos los han llamado "lejanos a Dios" otros pocos "raza superior". Viven entre los Muggles, odiándolos en secreto y deseando poder someterlos, caminan...