PSYCHO | (bilogía mentes)

49 ~ JUEGO MENTAL

¿Cuál es el peor sentimiento que has tenido en la vida?, ¿cuál es el peor pensamiento que ha cruzado tu mente?, ¿cuál es el peor miedo que te ha consumido?, la pregunta adecuada quizás seria, ¿de verdad nos conocemos? O ¿qué tanto lo hacemos?. Si escuchas el sonido del disparo solo significa una cosa; no estas muerto, porque el disparo no era para ti por lo tanto no ha tocado tu cuerpo.

El sudor frío en mi cuerpo me daba incomodidad, sentimientos atacaron con fuerza ahogando mi sentir, la respiración se detuvo. La sangre fresca frente a mis ojos fue lo único que pude ver. De pronto todo desapareció, todo se volvió negro y perdí el conocimiento.

𝑭𝒍𝒂𝒔𝒉𝒃𝒂𝒄𝒌

—Jamás se lastima lo que se ama —Dijo Vidarr— No cuando eres consiente de que amas.

—¿Qué pasa sino se sabe amar? —preguntó Sienna— O no eres consciente.

—Se aprende, y puede ser doloroso. Porque en el proceso te conoces realmente a ti mismo para así dar lo mejor —explicó mientras me brindaba de su escasa comida— Si el amor no es consciente tal vez no es amor, o suficiente ya que el amor propio está débil por lo tanto no es capaz de amar en el exterior.

—Quizás pueda encontrarse roto —mencionó Sienna pensativa.

—Las personas rotas también rompen, y de la manera más extraordinaria... pero eso solo se puede entender si de verdad amaste y del estado personal —Vidarr volteó a verme con una sonrisa— Después de todo aunque las almas rotas sean excepcionales siguen siendo pedazos con filo y cortan.

—¡Vamos pequeños lobos, compartan la comida! —Sienna ordenó con dulzura.

—Pero yo no quiero compartir con Asger —me queje.

—Oh vamos pequeña loba, o Asger se quedará con hambre y eso le hará daño —hizo una cara triste— Tu jamás le harías daño a alguien que amas, ¿O si?.

𝑭𝒊𝒏 𝒇𝒍𝒂𝒔𝒉𝒃𝒂𝒄𝒌.

Mi mente volvió a tener el control sobre mi cuerpo. Un respiró profundo por las fosas nasales y la boca provocaron que mis ojos se abrieran con desesperación levantando la silueta. La luz volvió mi vista borrosa y enseguida se cristalizó entrando en shock.

—¡Storm! —una voz masculina con preocupación sonó como si estuviera lejos.

Aún no podía centrar y estabilizar mis sentidos cuando sus brazos me rodearon en un abrazo dejándome respirar su aroma. Su presencia y cercanía me brindaron una protección llena de calma que no sabía qué necesitaba.

—Aquí estoy —murmuró— Aquí estoy a tu lado, todo está bien. Todo fue un sueño.

De pronto sentí un alivio y lo abracé tan fuerte para después verlo con los ojos llenos de lágrimas mientras tocaba su rostro sin querer lastimarlo.

—Yo... yo —trate de respirar ya que mi oxígeno era escaso— te dispare —dije casi sin voz.

—No, no lo hiciste —confirmó— Solo fue un sueño.

Me abrazo cuidando cada detalle con fragilidad pues no era necesario decir con palabras lo vulnerable que me encontraba.