Ao'nung
Todos escuchamos la conversación, desde donde estábamos se escuchaba a la perfección, aun me sorprende el hecho de que ninguna de las dos se hubiera dado cuenta de que nos encontrábamos a unos cuantos metros escondidos entre matorrales.
La conversación dio fin cuando la na'vi le comunicó a Kiri que Neteyam había despertado, ya que esta claramente conmocionada echó a correr hacia la aldea.
- ¡Vamos, vamos, vamos! - dijo Lo'ak en algo que no llegaba a ser un susurro.
Entonces todos nos escabullimos de nuestro escondite y empezamos a correr tras Kiri. Los Sully corrían rápido, aun así Tsireya, Rotxo y yo les seguíamos el paso, lo intentábamos al menos.
De pronto mis piernas se paran en seco. Nadie más lo hace, todos corren y no miran hacia atrás. No estaba cansado, no lo suficiente como para dejar de correr, no, el problema no era ese; el problema estaba en mi cabeza que no dejaba de recordarme que una na'vi, que además de desconocida era un peligro potencial, se encontraba andando a sus anchas por la isla, una isla llena de familias y niños desprotegidos. Un pueblo que en un futuro no muy lejano sería mío.
Entonces miro hacia atrás y obligo a mis piernas a obedecer. Vuelvo al último lugar donde la habíamos visto hablando con Kiri, pero ella ya no se encontraba ahí. Empiezo a buscar por los alrededores, y gracias a la gran madre la encuentro, no se había movido mucho realmente.
Se encontraba a la orilla del Lago de Primavera, observando maravillada la biodiversidad que despertaba con las primeras horas de la noche. En el lago se podía ver el reflejo de algunas estrellas y lunas cercanas a Pandora, que junto a los peces de colores que habitaban el agua, hacían del paisaje una belleza natural.
Distintas criaturas la observaban al igual que yo lo hacía; algunas eran pequeñas, otras un poco más grandes; algunas reptaban, otras volaban... Juraría incluso que las plantas bioluminiscentes que ella tocaba o simplemente rozaba al pasar brillaban más que el resto. Era como si una parte de Eywa viviera en ella. Eso solo lo había visto en otra na'vi antes, una que supongo que ahora mismo se encontrará junto a su querido hermano riendo, puede que incluso llorando de emoción. Kiri siempre había sido muy sentida para esas cosas.
Viendo que ella parecía distraída me tomé la libertad de analizarla un poco más, por si en algún momento se revelaba en nuestra contra, poder tener sobre ella toda la información posible.
Ya la habíamos visto una vez, durante la pelea, que como los chicos bien comentaban, por muy peculiar que fuera su blanco pelo, sin duda alguna, sus hipnotizantes ojos violáceos eran lo que llamaban la atención de ella; eso claro, si no teníamos en cuenta su habilidad en el combate.
En ese mismo instante me descubrí observando su atlético cuerpo; con unos brazos fuertes y largos, terminados en unas manos casi idénticas a las de los Omaticaya, muy hábiles para el arco. Su pelo, blanco como las estrellas más brillantes caía sobre sus hombros; no estaba completamente trenzado como el de los Sully, pero si que contenía pequeñas trenzas intercaladas que a su vez eran adornadas con pequeñas piedrecitas.
Ella andaba lentamente observando con mucho detalle su alrededor, parecía realmente fascinada. Me pude fijar en como su torso lo cubría una especie de tela rígida, parecía hecha de piel, de un color muy oscuro haciendo increíble contraste con su piel. Pasé mi vista rápidamente por su abdomen, algo marcado y de pequeña cintura, para mi vista caer finalmente en su cadera. El movimiento que esta hacía con cada paso era realmente hipnótico, digno de competir con su mirada. Con cada uno de sus pasos, esta se balanceaba con sutileza de lado a lado, haciendo que mi atención se posara en ella más tiempo de lo debido.
No tengo tiempo para analizar el resto ya que escucho como una pequeña rama seca rompe bajo mis pies. Echo las orejas hacia atrás y maldigo para mi mismo, entonces veo como ella se gira hacia mí y lleva la mano a esa cadera que durante tanto (e imprudente) tiempo había observado, para finalmente desenfundar su cuchillo.
No tengo ninguna duda de que me ha visto. Sopeso mis opciones, que son pocas, así que decido hacer lo que creo que un buen líder haría. Dialogar. ¿Que otra cosa iba a hacer teniendo en cuenta de que no llevaba ningún arma conmigo?
- ¡Hey! No te voy a hacer daño. - digo saliendo tras el árbol en el que me escondía con los brazos abiertos. - No tengo nada, ¿lo ves? - dije mostrándole como no traía ningún arma conmigo.
Ella parecía analizarme, me entendía, eso lo sabía, pero estaba claro que no era una na'vi de muchas palabras y el hecho de que siguiera apuntándome con un cuchillo no me tranquilizaba en absoluto.
- Suelta el arma, rutxé - le pido por favor. Ella parece pensárselo. - Conozco a Neteyam, sí, yo soy amigo suyo.
- Él no me ha hablado de ti. - dice.
- Yo soy Ao'nung, amigo de los Sully, futuro líder Metkayina. - dije pero su cara de confusión me lo dijo todo. No me conocía.
Serás skxáwng Neteyam; no le había contado nada sobre mi. Y mira que llorar en su funeral...
Para cuando dejé mis pensamientos a un lado y me centré en el ahora ella ya se había dado la vuelta y había decidido retomar su investigación, esta vez muy curiosa frente al agua del lago.
Me acerqué otro poco y enseguida pude notar qué era lo que tanta intriga le causaba, no eran los peces, ni los reflejos de las constelaciones... lo que la asombraba de sobremanera era ver las burbujas que se encontraban en él.
- Aquí las llamamos burbujas - digo acercándome cada vez más a ella. - En el centro de la isla hay un volcán.
La miré para asegurarme de que entendía a lo que me refería con la palabra "volcán", ella me miraba y asentía suavemente, así que continué.
- El caso es que ese volcán, aunque ahora permanezca dormido, tiene galerías subterráneas que lo conectan con ciertas zonas de la isla. Esta es una de ellas. - señalo las burbujas y ella sigue mi mano. - El calor del volcán viaja por esas galerías hasta llegar aquí, que al encontrarse con el lago, expulsa ese calor creando estas burbujas, y convirtiendo este lago en una de las pocas aguas termales de la isla.
No estaba del todo seguro de que hubiese entendido mi explicación sobre aguas termales, pero parecía entretenida observando las burbujas salir una y otra vez a la superficie.
- Deberías meterte. - la animo. - El agua no te va a hacer ningún daño, de hecho vendrá bien para ayudar a limpiar toda esa sangre de tu piel. - ella me miraba con desconfianza. - Además está calentita.
No hicieron falta palabras para dejar en claro que no solo no pensaba meterse, si no que tampoco se fiaba un pelo de mi.
- Esta bien. - dije mirándola. Entonces me metí al agua; el cálido agua rozó mi piel y tuve que reprimir un pequeño gemido. - Tu te lo pierdes. - dije señalando el lago con la esperanza de enseñarle que no pasaba nada.
Ella me miraba, también a los peces y las burbujas, pero no entraba. Cansado de esperar me sumergí en el agua, y una vez saqué la cabeza fuera me dispuse a disfrutar de la sensación de las burbujas masajeando mi cuerpo.
Y debió parecerle convincente, ya que siento movimiento a mis espaldas. Al darme la vuelta veo como despacio ella va entrando al agua. Sonrío inconscientemente.
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Tanhì Taw ( Neteyam Sully )
Fanfiction━━━━━━━━━※━━━━━━━━━ Han pasado tres años tras la muerte de Neteyam y su familia trata de seguir adelante con su vida, pero de pronto, se ve interrumpida por una inesperada llegada. ━━━━━━━━━※━━━━━━━━━ ANTES DE LEER - La historia contiene varios sp...