Capítulo 49:
Desafíos.Kimberly caminaba por varios de los pasillos del colegio, manteniendo una mirada de superioridad mientras algunas personas la veían. Su cabello corto ahora lucía unos mechones verdes, mientras el delineado en sus ojos resaltaba más su mirada. Un piercing acompañaba su labio inferior, y una pequeña raja en su ceja derecha se hacía mirar con claridad. Su nuevo cambio había llamado la atención de muchas personas, incluyendo algunos profesores que se han quejado con el director. Es por esa razón que sus ojos buscaban a alguien en particular para divertirse un rato discutiendo, así que al encontrar a esa persona mostró una maliciosa sonrisa en su rostro.
Las intenciones de Kimberly son claramente para molestar y divertirse, mucho más ahora que no tiene amigas para poder conversar.
—A ti te estaba buscando, presidenta —dijo Kimberly, llegando hacia donde está Jimena.
Su ex amiga alzó sus cejas al verla, recordando el nuevo look que está luciendo Kimberly en esta mañana.
—Aún me sigues dando mucha risa, Kimberly —dijo Soraya, quien acompañaba a Jimena —¿Y este nuevo cambio a qué se debe?
—Soy una chica libre que se expresa como quiere. Amo mi nuevo look, es por eso que he venido a hablar con la presidenta.
—¿Y yo qué tengo que ver con esto? —preguntó Jimena, frunciendo su ceño.
—Eres la presidenta estudiantil, ¿no es así? Se supone que velas por los derechos de los estudiantes.
—¿Qué es lo que quieres, Kimberly? Ve al grano —pidió Jimena, cruzándose de brazos.
—No seas tan amargada, presidenta. ¿Acaso se te subieron los humos a la cabeza?
—Mejor vámonos, Jimena. Esto es una pérdida de tiempo —dijo Soraya, ya cansada de escuchar a Kimberly.
—Te puedes ir tú si quieres. Necesito hablar con la dueña del circo, no con las payasas.
—Más payasa serás tú con ese cabello verde y ese delineado gótico. Una payasa deprimida. Te pareces al Joker.
—Soraya, no te alteres —le pidió Jimena mientras Kimberly soltaba unas sarcásticas carcajadas —. Habla ya, Kimberly. En este momento íbamos a hacer algo. Sé breve.
—Quiero que me defiendas ante el director. Algunos profesores se han ido a quejar con él por mi nuevo look, algo que es absurdo. Yo puedo venir como yo quiera. Lo importante es que cumpla con mis evaluaciones y apruebe mis materias. Además, pronto me graduaré.
—Dudo mucho con las notas que llevas desde que empezó este año escolar —dijo Soraya.
—Tú cállate. Esto no es contigo.
—A mí no me mandes a callar, loca.
—Más loca será tu abuela.
—La tuya.
—¡Basta! —intervino Jimena, colocándose en medio de ambas —No vale la pena seguir con estos insultos.
—¿Me vas a ayudar o no?
—Kimberly, tú muy bien sabes que en este colegio hay un reglamento que hay que cumplir. Entre esas reglas está la vestimenta.
—La vestimenta no dice nada en contra de mi look. Lo que pasa es que no están acostumbrados a este estilo, mucho menos en una chica. Cumplo con mi uniforme como es, lo único diferente es mi cabello y mi pircing.
—Y ese horrible delineado —agregó Soraya.
—Hablaré con el director de tu caso cuando pueda. Por ahora me iré porque tengo algo que hacer.
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Tóxicos: Muy Dañinos
Teen FictionColocar a un gato y a un ratón en un mismo cuarto sin salida puede ser mala idea. Rafael y Kimberly son dos personas sumamente tóxicas, a tal punto de que no les importa dañar a los demás. Sus vidas se basan en lágrimas, gritos y diversión. Compa...