Capítulo 73:
Miedo al futuro.En horas de la madrugada los muchachos se reunieron en varios lugares de la casa para hablar. La pijamada aún seguía; pero en este momento no había una actividad específica para hacer, simplemente hablar sobre temas diferentes.
Mariano se encontraba sentado en una de las sillas del comedor, mirando a quienes estaba reunidos en la sala y en la cocina. Sobre la mesa tenía su celular, el cual utilizaba para mirar las distintas fotos y videos en los que compartía con Kendrick.
Estar en la pijada lo ha hecho distraerse por ciertos momentos, pero no oculta la tristeza que siente en su corazón. Sabe perfectamente que si se iba a su casa lloraría por toda la noche, y muy probablemente consumiría droga para olvidarse del dolor. El miedo que ahora siente es terminar como Kendrick, muerto por una sobredosis de droga. Esa también fue una de las razones por las que decidió no negarle la invitación a Jimena, ya que en su casa se llenaría de más miedo y más tristeza.
Jimena ciertamente ayuda a Mariano a estar bien, aunque ella no lo sepa. Él sabía que estando en la pijamada podía sólo verla y sentirse bien, así que cada vez que puede hacerlo sonríe y agradece en su corazón que ella sea su amiga.
—¿Está todo bien? —preguntó Raquel, sentándose a un lado de Mariano para hacerle compañía.
—Sí, todo está bien —contestó Mariano, tratando de mostrar su mejor sonrisa.
—Jimena nos pidió, antes de que tú llegaras, que no habláramos del tema, pero sabes que me es inevitable no hacerlo cuando yo también conviví con él —dijo Raquel, apretando una de las manos de Mariano para darle apoyo —. Sé muy bien que te duele lo que le pasó a Kendrick. No retengas tus ganas de llorar, créeme que después te sentirás mejor.
—Sí he llorado —confesó Mariano, pasando sus manos por sus ojos —. Cuando me enteré de la noticia... no pude evitar hacerlo.
—¿Y sientes que quieres llorar más?
Mariano no contestó, simplemente porque el nudo en su garganta no dejó que siguiera hablando. Su mirada bajó hacia los dedos de sus manos, con los cuales jugaba para tratar de mantener el control.
—No me quiero imaginar cómo estará Rafael. A pesar del distanciamiento y los problemas que él tenía con Kendrick sé que le debe de estar doliendo su muerte. ¿Tú has hablado con él? ¿Cómo lo ves?
—Ni siquiera contesta mis mensajes —dijo Mariano, armándose de valor para responder —. Al velorio tampoco se apareció. Espero que mañana pueda ir al entierro.
—Debe de estar muy triste por la noticia —dijo Raquel, quedándose pensativa por unos segundos.
Mariano volteó a mirarla, notando así lo pensativa que estaba. Él sabe que en el fondo ella quiere hablar con Rafael, por lo menos para saber cómo está. Raquel aún lo quiere, y es porque ella conoció muy bien a Rafael.
—Deberías de llamarlo —le sugirió él, captando la atención de Raquel.
—He tratado de alejarme lo más que puedo de él, pero siempre pasa algo que hace que volvamos a encontrarnos o hablar.
—En este momento debe de estar esperando por lo menos un mensaje de ti, ¿no lo crees?
—Temprano en la mañana le mandaré un mensaje. En este momento debe de estar dormido.
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Tóxicos: Muy Dañinos
Teen FictionColocar a un gato y a un ratón en un mismo cuarto sin salida puede ser mala idea. Rafael y Kimberly son dos personas sumamente tóxicas, a tal punto de que no les importa dañar a los demás. Sus vidas se basan en lágrimas, gritos y diversión. Compa...