Capítulo 19:
Una oportunidad más.Al día siguiente Raquel se encontraba sentada en uno de los asientos del salón, siendo la hora del recreo. Algunas personas se encontraban en dicho lugar, pero ella estaba distante y distraída. Su mente aún pensaba en el engaño de Rafael, sin olvidar ningún detalle de lo que presenció ayer.
Rafael le había escrito varios mensajes para poder hablar; pero ella evitaba responderle, aunque ganas no le faltaban de poder contestar sus llamadas y mensajes.
Aunque lo que Rafael le hizo a Raquel fue muy desagradable, ella aún piensa en la posibilidad de darle una oportunidad más.
Los pensamientos de Raquel fueron interrumpidos cuando Luis llegó a sentarse frente a ella, llamando de esa forma la atención de la chica.
—Cristina me contó lo que te sucedió. Sinceramente no me sorprendió para nada lo que te hizo Rafael. Te hemos repetido una y otra que él es un mujeriego de clase A.
—Gracias por tu compañía, Luis; pero si vienes a hablarme mal de Rafael como también lo hace Cristina entonces es mejor que te vayas y me dejes sola.
—¿En serio aún lo seguirás defendiendo?
—Lo que me hizo estuvo mal, y a mí más que a nadie me duele; pero aún sigo enamorada de él.
—¿Qué? Raquel, lo viste en su cuarto con una muchacha cubierta en sábanas. ¿Qué necesitas para darte cuenta que él no es el chamo correcto para ti? ¿Acaso abrirás más los ojos si logras verlo en el pleno acto sexual?
—Luis...
—Ya lo perdonaste varias veces por cosas que te ha hecho. ¿Recuerdas aquella vez cuando te hizo lo mismo? Según él no lo volvería a hacer, fíjate ahora.
—Necesito tiempo para pensar.
—¿Qué necesitas pensar? Raquel, él no es sano para ti.
—Rafael podrá tener un comportamiento posesivo; pero te aseguro que no es malo.
—Me queda claro que lo perdonarás otra vez. Estás tan enamorada de él que te niegas a perderlo.
Luis se levantó de su pupitre para luego dirigirse hacia los que estaban en el final del salón, dejando de esa forma sola a Raquel. Él no estaría dispuesto a seguir insistiéndole, ya que el obsesivo amor que siente ella por Rafael no le permite ver la realidad de la situación.
Raquel se detuvo a mirar por unos segundos su celular para verificar que Rafael ya no le mandaba más mensajes, eso hizo que ella frunciera su ceño y empezara a mover su pierna derecha en señal de la ansiedad que poco a poco se estaba manifestando en ella.
Le estaba empezando a parecer extraño el hecho de que él ya no le mandara ni emojis ni stickers. Ella pensó que a lo mejor le habría pasado algo, o tal vez se cansó de seguir insistiendo.
El tan solo pensar que él no le quiere seguir insistiendo hizo que ella empezara a sentir cierta impaciencia y mucha curiosidad.
Realmente Rafael quiere seguir mamándole mensajes a Raquel; pero Kimberly le aseguró que al dejar de escribirle haría que Raquel se acercara a él con mucha sumisión y más enamoramiento que antes.
—Ya verás que ella se arrepentirá de haberse molestado contigo.
—¿Por qué me diste este consejo? Pensé que me querrías molesto con ella para tenerme más cerca de ti.
—Claro que los quiero molestos; pero de repente sentí la satisfacción de que ella vuelva arrepentida hacia ti. Para eso primero debes de dejar de insistirle con tus molestos mensajes.
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Tóxicos: Muy Dañinos
Teen FictionColocar a un gato y a un ratón en un mismo cuarto sin salida puede ser mala idea. Rafael y Kimberly son dos personas sumamente tóxicas, a tal punto de que no les importa dañar a los demás. Sus vidas se basan en lágrimas, gritos y diversión. Compa...