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Jaesung, Jaehyun y Sungmin, populares, niños ricos, fama de rompecorazones y los mejores amantes del mundo. Tenía suerte de tenerlos a mi disposición y ellos de tenerme a la suya. Juntos los 4, éramos como dinamita y no importaba que me consideraran su perra, porque estaba orgullosa de serlo.
Nos encontrábamos desnudos sobre la cama, Sungmin sentado contra el respaldar, conmigo en su regazo, viéndome con deseo, al mismo tiempo que Jaesung, quien se encontraba a lado de Sungmin con sus rodillas sobre el colchón, me besaba y Jaehyun pasaba sus manos por mis senos para acunarlos y apretarlos suavemente, detrás mío. El pelinegro acariciaba mis caderas con sus pulgares mientras observaba la forma en que los otros me mantenían ocupada, se inclinó hacia adelante, quitando una de las manos de Jaehyun, abriendo la boca y tomando uno de mis pezones, lamiéndolo y succionando para hincharlo, y luego hacer lo mismo con el otro, momento que Jaesung aprovechó para imitar su acción en mi pecho, también chupándolo.
Jaehyun, quien se había quedado sin nada que tocar, bajó su mano a mi entrepierna, frotando mi clítoris con uno de sus dedos, yendo más abajo para mojarlo con mis fluidos, obteniendo lubricación para mejorar sus movimientos. El placer de tenerlo tocándome la vulva y a los otros dos comiendo mis tetas hizo que tirara la cabeza hacia atrás, reposándola en el hombro del australiano. Sus labios tomaron posesión de mi cuello y dejó una que otra marca.
Sungmin alejó a los chicos de mi cuerpo para echarme completamente en la cama. Alzó mi pelvis hacia él, pasando la punta de su nariz por toda mi húmeda franja, inhaló profundo y sacó la lengua, presionándola contra mi botón y realizando movimientos rápidos en este. Gemí por la agradable sensación, pero fue el momento perfecto para Jaehyun, pues aprovechó en poner su glande en la entrada de boca.
— Abre bien linda, papi quiere follarte la boca.
Obedecí y deslizó toda su polla dentro de mi cavidad bucal, tocando mi mentón con su vientre y mi nariz con sus bolas, tal como dijo, empezó a embestir.
Por otro lado, Jaesung tomó mi mano e hizo que la cerrara alrededor de su miembro para masturbarlo. Así pues, me tenía a mí misma masturbando a Jaesung, a Sungmin comiéndome el coño y a Jaehyun follándome la boca.
— Oh~ mierda, voy a correrme. — habló Jaehyun, deteniendo sus movimientos. — Esperen, déjenla.
Los chicos me soltaron, él hizo girar mi cuerpo, teniéndolo ahora a él en medio de mis piernas. No tardó mucho para volver a entrar en mi pero ahora en otro de mis agujeros, el que siempre estaba dispuesto a recibir a los tres chicos. Abriéndose como parque de diversiones para que sus penes entraran libremente y se divirtieran en el. Claramente esta no sería la excepción, Jaehyun entraba en mi tan rico que mis gemidos salían a través de mis labios y llegaban a todos los rincones de la habitación.
Los otros dos chicos observaban como me follaba, mientras se entretenían pasando sus manos por sus penes. No tardó mucho tiempo y Jaehyun se corrió, soltando un gemido al sentirme apretar su miembro, y supo que también me había corrido. Jaehyun salió de mí, pero ahora era turno de Sungmin que inmediatamente me tomó como suya.
Ultrajando mi entrada por segunda vez, pero ahora su polla reemplazaba su lengua. Y no me quejaba cuando de los tres, él la tenía más gruesa, expandiendo mis paredes un poco más.
— Te vas tan bonita cuando eres cogida como una muñeca. — comentó Jaesung al costado de tu oreja.
Lo miré borroso por los ojos llorosos de placer y abrí la boca pidiendo besarlo. Su lengua como de costumbre fue la primera en llegar, siendo un beso sucio e inestable por las embestidas de Sungmin que hacían que todo tu cuerpo brincara. Su lengua jugaba con la mía y de vez en cuando chupaba la suya, pero el rico beso tuvo que parar cuando Sungmin me tomó de las piernas para flexionarlas, tocando mis tetas con mis rodillas, así machacó con fuerza, tocando aquel punto que me hizo gritar de placer.
Él también metió su lengua en mi boca, unas embestidas más y se vino de igual forma dentro mío como Jaehyun. Ya sabías por donde iba la cosa hoy.
— Vamos a llenar a nuestra querida Haneul hoy. — Jaehyun sonrió divertido.
— Nuestra bebé. — Sungmin me besó para luego retirarse.
— Nuestra puta de semen. — habló al final Jaesung.
Él me puso boca abajo en el colchón, tomó mis caderas y las elevó, empujando mi espalda para que no vaya a subirla, alzando mi trasero a la altura de su pene parado. Se metió de una sola estocada, volví a soltar el gemido en forma de grito. Seguramente me encontraba con el cabello hecho un desastre, la cara llena de lágrimas debido a la sobreestimulación, pero aun así no cambiaría que también Jaesung me abriera el coño con su miembro.
— Solo eres un lindo hueco que usamos para llenar, ¿cierto? — habló Jaesung sobre mi oído. — Mira cómo estás de sucia aquí. — tomó mis nalgas con sus manos y los separó, de seguro observándose un desastre blanquecino en mi entrepierna.
Las penetraciones de Jaesung hicieron estragos con el semen de Sungmin y Jaehyun que aún tenía dentro. Al follarme claramente se escuchaba ese chapoteo debido a mi hueco lleno de sus fluidos junto con los míos.
— Mmm... ¿la linda niña quiere que también me corra dentro de ella? — gemí como respuesta.
— Hazlo Jaesung, ella lo desea tanto, desea tanto ser llenada por sus tres hombres, ¿cierto? — Sungmin dijo mientras nos mirábamos frente a frente.
Y la presión en mi vientre ya no podía más, exploté en mí ya cuarto orgasmo, corriéndome fuertemente sobre la polla de Jaesung, mojando su pelvis con un squirt.
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Hi, espero les haya gustado y dejen su estrellita de apoyo.
