CASADOS POR ACCIDENTE

CAP. 26

Después del caos en la habitación del hospital, donde Victoria sufrió otra crisis de ansiedad frente a todos los presentes, la preocupación se apodera de todos. Max, desesperado por noticias, espera ansiosamente al doctor. Aarón, aunque intenta disimularlo, también está profundamente preocupado por Victoria. Dafne y Miray están igualmente inquietas.

Finalmente, el doctor emerge con información esperada pero temida. Victoria ha experimentado otra crisis, más intensa esta vez. Max, al borde de la desesperación, ruega al doctor que lo deje entrar a verla.

- Doctor, ¿cómo está mi bonita? - pregunta Max con voz temblorosa

El doctor, con gesto serio, responde

- Ha sufrido otra crisis, pero ya se encuentra estable nuevamente. Necesita descansar.

Max insiste, con los ojos llenos de angustia

- Por favor, quiero quedarme con ella.

El doctor lo mira con compasión antes de ceder

- Está bien, pero no la agobies. Necesita tranquilidad.

Max entra a la habitación, seguido de cerca por Aarón, Dafne, Miray. El tiempo parece detenerse mientras esperan noticias sobre la condición de Victoria. Después de varias horas de angustiosa espera, Miray decide que es hora de partir.

- Bueno, Max, nosotros nos vamos - dice con tono compasivo.

- Está bien, señora Özdemir, y gracias por todos - responde Max con voz cansada.

Dafne, sin embargo, decide quedarse.

- Madre, yo quiero quedarme - anuncia con determinación.

Miray le da una mirada comprensiva antes de asentir

- Está bien, entonces me iré con tu hermano

Mientras tanto, Aarón se debate entre el deseo de quedarse con Victoria y la responsabilidad de acompañar a su madre. Finalmente, cede ante la insistencia de su madre y sale de la habitación con ella.

Dafne ofrece traer algo de comer a Max, él agradece, pero prefiere quedarse junto a Victoria. Se acerca a ella, toma su mano y la besa con ternura, expresando su deseo ferviente de que se recupere pronto. Dafne, observando la escena con afecto y dolor, decide irse, dejando a Max y Victoria a solas.

- Por favor Bonita, tienes que estar bien - murmura Max con voz entrecortada - Todo estará bien, lo prometo.

El silencio en la habitación es interrumpido solo por el suave sonido de las máquinas médicas. Max permanece junto a Victoria, sintiendo una mezcla de preocupación y esperanza. Le susurra palabras de aliento, prometiéndole que estará a su lado en cada paso del camino hacia la recuperación.

En la mansión Wilson, el padre de William aguarda la llegada de su hijo con impaciencia. Cuando finalmente aparece, lo recibe con una mirada inquisitiva.

- Al fin llegaste - dice Eric con tono serio - Dime, ¿arreglaste las cosas con Victoria?

William suspira, su expresión sombría.

- No, padre. No pude arreglar nada con Victoria. Ese imbécil de Max se metió antes de que pudiera hablar con ella, responde con frustración.

Eric frunce el ceño, claramente molesto.

- Es un idiota, en serio - murmura para sí mismo.

William, enfurecido, interviene rápidamente.

- Padre, deja de insultarme - replica con dureza.

- Mejor cállate y piensa en cómo recuperar a Victoria - añade con un tono desafiante - Aumenta los esfuerzos para recuperarla, pero ya - ordena, su voz llena de determinación.