CAP. 30

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- Aarón intenta explicarse, pero se encuentra en un estado de confusión y desconcierto que le impide articular, palabras coherentes. Sus padres, visiblemente molestos, comienzan una discusión con él, expresando su descontento por la manera repentina e inesperada en que se enteraron del matrimonio.

- ¿Qué está pasando? – balbuceó Aarón

- ¡Mira esto! ¿Qué significa esto?

El padre arroja el periódico hacia Aarón, quien lo recibe con las manos temblorosas. La noticia del matrimonio entre él y Victoria está estampada en letras grandes y audaces

- No sé qué decir...

- ¿Cómo pudiste hacer algo así sin decirnos nada? – dice la madre del otro lado de la cama

- Esto es inaceptable, Aarón. Nos has decepcionado profundamente. – expresa furioso

- Pero... yo...

- No hay excusas para esta falta de comunicación. ¿Cómo pudiste casarte sin siquiera informarnos? – expresa Miray

- No se trata de la chica, Aarón. Se trata de la falta de respeto hacia nosotros y hacia tu propia familia – frunce el ceño

Aarón intenta hablar, pero las palabras se atascan en su garganta mientras lucha por encontrar una explicación

- ¿No confiabas en nosotros lo suficiente para contarnos algo así? – habla con voz temblorosa

- Este no es el comportamiento de un hombre responsable, Aarón. Necesitamos una explicación convincente. – respira profundamente

Aarón se siente acorralado y culpable, incapaz de articular una respuesta satisfactoria

La habitación se llena de un silencio pesado, interrumpido solo por el sonido de las respiraciones agitadas y el murmullo distante de la discusión que se lleva a cabo.

A pesar de que sus padres no tienen objeciones respecto a Victoria ni al matrimonio en sí, lo que más les molesta es la falta de comunicación por parte de Aarón. Se sienten decepcionados y heridos por no haber sido informados de un evento tan importante en la vida de su hijo.

La habitación se llena de tensiones palpables mientras la discusión se intensifica. Las emociones están a flor de piel, con palabras cortantes y miradas de reproche que atraviesan el aire cargado de tensión. Aarón, sintiéndose acorralado y culpable, lucha por encontrar las palabras adecuadas para explicar lo inexplicable.

La atmósfera se vuelve aún más densa conforme la discusión continúa, con cada parte defendiendo su punto de vista con fervor. Es un momento de confrontación y conflicto, donde las heridas emocionales salen a la superficie y las relaciones familiares se ven puestas a prueba.

- ¿Alguna explicación, hijo? – pregunta Hamza

- ¿Pueden todos calmarse un momento? No sé de qué están hablando. – responde exasperado

- Aarón, ¿de verdad no sabes nada sobre este matrimonio? – pregunta Miray

Aarón intenta explicarse, pero de repente se siente mareado y su cabeza comienza a doler

- ¡Ay! Mi cabeza... me duele.

- Supongo que es por haber bebido demasiado en la fiesta. – rueda los ojos Hamza

- No, papá, solo tomé una copa de vino.

- No te creo. Si solo hubieras tomado una copa de vino, ¿por qué te duele la cabeza, hijo? – dice escéptico

- Está bien, cariño, solo necesitas descansar un poco. – intenta tranquilizarlos

En ese momento, la madre de Aarón interviene con una felicitación improvisada

CASADOS POR ACCIDENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora