CAP. 45

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Max se apartó ligeramente de Victoria, manteniendo una expresión calmada pero firme.

- Aarón, cálmate. No es lo que piensas. Estoy aquí para ayudarla —intentó explicar Max.

- ¡No me vengas con tus mentiras! —exclamó, sus celos cegándolo— ¡Ella es mi esposa! ¡No tienes ningún derecho a tocarla!

Victoria, aún débil y asustada, intentó intervenir.

- Aarón, por favor, no es lo que parece... —dijo con voz temblorosa.

Pero Aarón no escuchaba razones. La imagen de Max abrazando a su esposa había desencadenado una tormenta de emociones que no podía controlar.

- ¡Tú te callas! —le espetó a Victoria, su voz cargada de una mezcla de dolor y furia—. ¡Y tú, Max, aléjate de ella!

Max dio un paso adelante, su rostro endureciéndose.

- ¡Eh, cálmate! No le hables así. Mi Bonita no merece este trato —dijo Max, su voz llena de firmeza.

Aarón se giró hacia Max, su ira intensificándose.

- ¿Y tú quién te crees para decirme cómo hablarle a mi esposa? —vociferó Aarón, avanzando hacia Max de manera amenazante.

- Alguien que se preocupa por ella y que no permitirá que la maltrates —respondió Max, sin retroceder.

Charlotte, alarmada por el griterío, apareció en la escena, intentando calmar las aguas.

- Aarón, por favor, cálmate. Todos estamos aquí para ayudar a Victoria. Necesitamos trabajar juntos, no enfrentarnos así.

- ¡No me importa lo que digan! —vociferó Aarón— ¡Voy a llevármela de aquí ahora mismo!

- No, Aarón —dijo Victoria, reuniendo el valor suficiente para hablar— Yo quiero quedarme aquí. Max solo está tratando de ayudarme.

- ¿Quedarte aquí? —la voz de Aarón se quebró, mezclando incredulidad y celos— ¿Con él?

- Sí, porque necesito calma y apoyo, y ahora mismo tú solo traes más caos —respondió Victoria, sus palabras golpeando a Aarón como un martillo.

Aarón, respirando con dificultad, miró a Max con una mezcla de odio y desesperación.

- No voy a permitir que este imbécil se interponga en mi matrimonio.

Max dio un paso adelante, manteniendo su voz tranquila pero firme.

- Aarón, esto no se trata de ti ni de mí. Se trata de lo que Mi bonita necesita. Si realmente la amas, entenderás que debemos hacer lo mejor para ella.

Las palabras de Max, aunque dichas con la mejor intención, solo sirvieron para inflamar más los celos de Aarón.

- ¡No necesito que me digas cómo amar a mi esposa! —gritó, avanzando hacia Max de manera amenazante.

Charlotte, viendo que la situación podría descontrolarse, intervino con una autoridad que no admitía réplica.

- ¡Basta! —dijo, su voz cortando el aire como un cuchillo— Aarón, entiendo que estás molesto, pero esto no es la manera de resolver las cosas. Victoria está aquí porque necesita paz. Si realmente la quieres, entonces haz lo correcto y dale el espacio que necesita para recuperarse. Así que de la manera más amable te Pido que te vayas de mi casa si no quieres que llame a seguridad – advierte

Aarón se quedó quieto, sus puños apretados y su respiración agitada. Finalmente, sin decir una palabra más, salió de la mansión, golpeando la puerta tras de sí.

CASADOS POR ACCIDENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora