CAP. 99

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Mientras tanto, en la villa, Aarón y Victoria estaban conversando

- ¿qué te pareció la entrevista amor? – dice mientras le abraza

- ¿Me pareció? – empieza a hablar, Aarón le mira con una ceja elevada - la verdad me encanto

- A mí me encantas tú – le da un beso en la mejilla

- tu sí que estás loco – sonríe - mira que traerme serenata frente a todo el mundo, sobre todo decir esas cocas cursis – se sonroja al recordarlo

- Todo eso y mucho más te mereces, sacas la mejor versión de mí – le da la vuelta, la mira

- Te amo – dice ella acariciando su rostro

- y yo a ti – lo besa

- bueno amor – se separa - ya es tarde, mejor vayamos a descansar – agarra su bata y se mete a la ducha

- llego la hora de mi venganza – sonríe entrando a la ducha, ella se estaba bañando hasta que siento unas manos en mi espalda, se da la vuelta inmediatamente sobresaltada, y ahí estaba él

- ¿Amor? ¿Qué haces? – pregunta cuando lo ve

- acaso no me puedo bañar con mi esposa

- ¿seguro? – le mira - ¿solo es bañarse o quieres algo más?

- ¿la verdad? ¿Si quiero algo más? – sonríe con picardía - te quiero a ti – le pega a la pared, le empieza a besar y a acariciar el cuerpo

- "¡mierda! Ya quiero que este dentro de mí ya" - piensa

Él ve el desespero que tiene Victoria, de un momento a otro se aleja de ella, el cual le deja desconcertada

- te dije que me las pagarías cariño – sonríe- y esta vez no me harás caer de ninguna manera, esta vez no volveré a caer en tentación, ¡amor! – sale de ahí

- ¡mierda! Así que esto es su manera de vengarse, por lo que le hice ¿veremos cuánto le dura? Veremos si no caes en tentación – se termina de bañar, se dirige al vestidor, se pone una lencería muy censual color blanco, la cual Aarón le había regalado, se arregla el cabello y se maquilla un poco, sale y lo mira, él estaba en la cama sentado en la orilla

- Que paso amor - pregunta burlándose, mientras ve a su esposa

- "veremos si te resiste a esto" – piensa mientras deja caer la bata que tapaba su cuerpo

- "¡mierda! Esta mujer sí sabe jugar sus cartas" – piensa mientras ve a su esposa muy sensual

- ¿pasa algo amor? – pregunta

- "¡no! ¡No! No puedo caer en su juego, no, ya no aguanto, me vale si caído en tentación" – se lanza a ella, le carga en sus brazos y le acomoda en la cama - esto es un golpe bajo señora Özdemir ¿esto no es justo? No puedo resistirme a ti y menos cuando estás vestida así – le empieza a besar con ferocidad

- no que dijiste que no caeréis en tentación, ¡cariño! – sonríe

- al parecer no la cumpliré - empieza a desnudar a Victoria - eres perfecta – empieza a acariciar cada parte del cuerpo de su amada esposa

- ahhh - suelta un gemido

- eres mía - hacen el amor toda la noche, Terminar agotados, Victoria acaricia el pecho de Aarón

- ¿no que decías que no ibas a caer en tentación? - pregunta

- eres la mejor tentación en la que no puedo evitar caer – le da un piquito

- ¿a si?

- además, esto fue un golpe bajo, sabes jugar muy bien tus cartas señora Özdemir

En la opulenta Mansión Özdemir, el día transcurría con la usual serenidad. Sin embargo, todo estaba a punto de cambiar. Miray estaba en el salón principal, contemplando un cuadro familiar, cuando una de las empleadas se acercó apresuradamente.

CASADOS POR ACCIDENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora