CASADOS POR ACCIDENTE

CAP. 90

- Sí, y Max no está ayudando para nada —agregó Oliver— Deberíamos intervenir antes de que esto se salga de control.

- Pero, ¿cómo? —preguntó Clara— No podemos simplemente interrumpir.

- Tal vez deberíamos intentar distraer a Aarón —sugirió Lucas— Hacer que se calme un poco.

Mientras discutían, Max terminó la canción con una nota alta y clara, recibiendo una ovación de la multitud. Aarón, todavía furioso, tiró de Victoria hacia él, marcando su territorio de manera clara.

- Victoria es mi esposa, Max. No olvides eso —dijo, su voz firme y posesiva.

Max, sin inmutarse, simplemente sonrió y asintió.

- Lo sé, Aarón. Solo estaba tocando una canción. No hay necesidad de ponerse así.

La tensión entre ellos era palpable, pero la multitud, ajena a los detalles del conflicto, seguía disfrutando de la música y el espectáculo. Los murmullos continuaban, y la atmósfera se llenaba de expectación y curiosidad sobre lo que podría suceder a continuación.

Los amigos de Victoria se reunieron más cerca, listos para intervenir si la situación se salía de control, mientras la noche continuaba, llena de emoción y drama.

La atmósfera en el bar estaba cargada de tensión y curiosidad. Mientras Max terminaba su interpretación y la multitud aplaudía, los murmullos se intensificaban, cada vez más intrigados por el drama que se estaba desarrollando.

- ¿Viste cómo Max le tocó la canción solo a Victoria? —murmuró una chica a su amiga— Eso fue tan romántico. ¿Crees que haya algo entre ellos?

- Es imposible no notarlo. Pero Aarón se veía furioso —respondió su amiga, observando la escena con ojos muy abiertos— ¿Qué crees que hará?

- Aarón no va a soportar que Connor siga mandando indirectas y ahora esto con Max —dijo Thomas, su ceño fruncido de preocupación.

- Nuestro amigo Max es un rival muy potente. ¿Viste cómo tocaba? —añadió Oliver— Además, es guapo y siempre tuvo una conexión fuerte con Victoria.

- ¿Y Connor? Él también está interesado en ella —apuntó Clara, observando cómo Connor miraba a Victoria con una mezcla de interés y desafío— Esto es una locura.

- Max es el presidente de las empresas Anderson. No puedo creer que esté aquí tocando en un bar —dijo Lucas, sorprendido— ¿Qué estará pensando?

Mientras tanto, Aarón mantenía a Victoria cerca de él, sus celos evidentes en cada movimiento. Max, sin inmutarse, se mantuvo cerca, su presencia una constante provocación para Aarón.

- Ni se te ocurra volver a tocar una canción para mi esposa —le advirtió Aarón, sus ojos fijos en Max.

- Solo estaba tocando una melodía —respondió Max con una sonrisa calmada— No hay necesidad de ponerse así.

Victoria intentó calmar a Aarón, pero la tensión entre los dos hombres era palpable. Connor, disfrutando del conflicto, se acercó y añadió combustible al fuego.

- Victoria, siempre tan encantadora. Parece que atraes la atención de todos los hombres aquí —dijo Connor, mirando a Aarón y Max con una sonrisa astuta.

- No necesitas recordármelo, Connor —replicó Aarón, su voz tensa— Sé muy bien cuánto la desean los demás, pero ella es mía.

La multitud continuaba observando, fascinada por el drama que se desarrollaba ante sus ojos. Los murmullos aumentaban, llenando el aire con especulaciones y comentarios.