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❝ And I don't care
if I'm
forgiven ❞────────────────
Jeongin tenía miedo.
¡Y el era una persona muy valiente! Antes de cumplir los seis años, donde sus dudas crecieron, su príncipe fue presentado cómo el único hombre que debía mirar de ahí hasta toda su eternidad cómo el próximo Blancanieves, y aceptó su destino con fervor, encantado de la sonrisa resplandeciente de un hombre encantador, una confianza que salía de su aura y un ego que podría soportar a medida pasaban los años. Nunca se le pasó por la mente que un par de años después de jurarle ser su unión eterna, estaría recordando el sabor de los labios del villano que lo intentaría matar en vez de disfrutar de los suaves dedos de Bangchan relajando su cuero cabelludo. De alguna manera, se sintió miserable, Jeongin odiaba las mentiras, y se había vuelto un perfecto mentiroso en los últimos días.
Muy pocas veces sintió miedo, muy pocas sintió ser controlado por ese sentimiento.
Cuando Jeongin tenía seis años, se había caído a un pozo, el mismo pozo en el que HyunJin cayó una semana atrás. En ese entonces, le gustaba jugar con las mariposas, esa vez, estaba persiguiendo una libélula bastante inquieta y se asomó al borde, un borde que no parecía tan borde. Luego... hubo una caída qué se le antojó infinita, que terminó con un chapuzón helado cómo el invierno, una lucha por intentar aspirar algo de vida, por tener un poco más de oxígeno. Se debatió en el agua mientras sus pesadas enaguas lo hundían al fondo, no tenía aliento para gritar ni para cantarle a los pajaritos pidiendo ayuda. Fue la primera vez en su vida que se sintió en soledad, con frío atroz y verdaderamente asustado, porque sin duda, Jeongin siempre fue un niño valiente.
Cada noche, antes de irse a dormir, su madre le contaba una historia que cualquier niño de su distanía debía haberle dado miedo: la Temible Madrastra de Blancanieves; un cazador cuya misión era arrancarle el corazón; perdido en bosques oscuros de árboles de troncos nudosos; enanitos, enanitos y más enanitos; una anciana vendedora ambulante que le regalaba un lazo que lo estrangulaba; una anciana vendedora ambulante que le regalaba un peine envenenado; una anciana vendedora ambulante que le daba una manzana envenenada. Mordisco, suspiro, desmayo (con elegancia). Caer dormido como si estuviera muerto. Ataúd de cristal. Sueños vacíos. Luego... beso. Despertar. ¡Príncipe! Enanitos contentos. Un gran baile coreografiado. Final Feliz.
Ni siquiera las partes del cuento de Blancanieves que se suponía que debían darle miedo lo asustaban, porque le resultaban familiares. Era el cuento de su madre, y su madre le había asegurado que un día aquel cuento sería suyo.
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Erase una vez || HyunIn
Fantasy❝ Dónde Jeongin es el hijo de Blancanieves, y HyunJin, el hijo de la Reina Malvada, lo corrompe. ❞ ㅤ☪︎⠀𖫲 HyunIn - Top HyunJin - Jeongin Bottom. Breve mención de otros ships ㅤ☪︎⠀𖫲 Angst, NSFW, Temas delicados, Fantasía ㅤ☪︎⠀𖫲 Historia...