Capítulo 74

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Dos meses más tarde

Han pasado dos meses desde el incidente. Y estoy mejor.

Me gustaría decir que estoy perfectamente, como si nada hubiera pasado, pero mentiría. No es así ni de lejos.

Después de que encerraran a Chris en una institución especializada, comencé a ir a terapia. Al principio me sentía mal, débil, porque volver con mi psicóloga lo sentía como una especie de fracaso.

Porque ya había ido en el pasado, en otra época de mi vida.

Lo hablé con ella, con mis padres, hermanos y Ro-Ro, y todos coincidían en lo mismo: esta vez era diferente porque había pasado por un evento traumático. Una persona externa había hecho algo contra mi persona.

El apoyo incondicional de todos ellos me ha ayudado a seguir adelante. A no sentirme una fracasada.

Los proyectos que tenía firmados y pactados han sido retrasados. La verdad es que las compañías me apoyaron nada más hacerse público todo lo que ha pasado, ya he empezado de nuevo a trabajar, pero con calma. Poco a poco.

Por ahora no he llegado a salir fuera del país. No es que me de miedo... pero me pongo muy nerviosa ante la posibilidad de verme allí sola sin que nadie pueda ayudarme.

Y sí, sé que tengo seguridad, y es algo que tengo que recordarme.

¿Cómo entró Chris en el apartamento de mi novio? Por lo que me he enterado porque la verdad es que sinceramente no quiero ahondar más en el tema, se mudó al edificio. Por eso es que el de seguridad no tuvo que preguntarle a dónde iba, porque daba por ello que iba a su casa.

¿Cómo entró concretamente dentro del piso e hizo todo eso? No quiero saberlo, pero puede ir desde que forzó la cerradura, hasta que robó las llaves a una de las asistentas.

No quiero saber más, y mi mente no necesita conocer dicha información.

No he vuelto a ir a casa de Roderick.

Bueno, eso es mentir.

Fui dos veces por recomendación de la psicóloga para que afrontara poco a poco la situación, para que pudiera ver que el edificio no era el problema, ni la vivienda.

Lo hice y me siento muy orgullosa de eso, pero aun así no me siento cómoda.

Son los recuerdos del momento lo que me impiden estar allí.

Ante eso, Roderick ha decidido mudarse a una casa dentro del mismo barrio que la de nuestros padres. Es más pequeña que la casa donde me crié, unas cinco habitaciones, que sé que no son pocas, pero teniendo en cuenta todas las que hay en la casa de mis padres, pues lo son.

Así que aquí me encuentro. En la casa recién comprada de Roderick mirando por el ventanal del salón que comunica con el gran jardín. No sé cuánto tiempo llevo mirando todo esto, pero aún no me creo todo lo que ha cambiado mi vida en tan poco tiempo. En unos cuatro meses más o menos.

De empezar una relación con derechos con Roderick, a enterarme que llevaba casi toda la vida enamorado de mí, a tener una relación seria y a haber sido secuestrada por Chris.

Estoy mejor, la terapia ayuda, y mi círculo de apoyo también.

Las chicas han estado en contacto continuo conmigo, lo que me ha enseñado que aunque nos veamos poco por la industria sí que son amigas de verdad, aunque yo pensara que no. Y Gabe...Gabe se ha quedado varios días por aquí y todo.

Me siento muy afortunada de todo esto.

Escucho unos ruidos lo que me hace girar hasta ver a Roderick jugando con Olaf. Quiero otro gatito que le haga compañía ya que no me gusta tener solo uno, pero todavía es pronto para todo eso. Ni siquiera Roderick y yo nos hemos planteado el vivir juntos.

¿Me gustaría? Obviamente.

Es algo que hemos barajado, incluso se lo he mencionado a mi psicóloga y me ha dicho que lo que me he pasado no puedo impedirme seguir adelante y hacer lo que me apetezca. Aunque todavía no es algo de lo que hayamos hablado seriamente.

Decido acercarme y sentarme al lado de los dos.

Roderick me pone una mano en la pierna y cierro los ojos dejándome acariciar. Dejándome impregnar por su olor.

Estoy sanando.

Estoy sanando, vuelvo a repetir.

— ¿Todo bien?

Sonrío y asiento mientras acaricio al gatito.

Me da un beso en la mejilla.

— ¿Te vienes entonces a vivir conmigo?

Abro los ojos ante la sorpresa, pero sonrío porque la respuesta es clara.


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