Las chicas Biancci (TERMINADA)

CAPITULO 35. Diferentes conceptos de la lealtad

Cuando llegamos al Loft estábamos discutiendo ya que le pregunté el por que no me había llevado a mi casa a lo que él me respondió "me diste permiso para robarte hasta la noche" y cuando le argumente que debía ya cambiarme de ropa se justifico diciendo que ¡ahí tenia ropa limpia! ¿Como es posible? Cuando entramos escuchamos ruido pero no se veía nadie, segundos después entro Danny a la cocina pero lo hizo desde una puerta que nunca había visto antes.

— ¡Ah! Vinieron — dijo yendo a la cocina a buscar unas cosas, nos acercamos y Abbel le dio su bolsa con comida.

Cuando tomo el contenedor lo abrazo como si fuera un peluche lo que le hubiera dado

— ¡ooh! gracias, tendré que llamar a tu madre — dijo agradeciendo y guardando su comida en la nevera, Abbel igual lo hizo y yo pedí el favor de que igual guardaran el mio, Dan me miró con una particular sorpresa en su cara — ¿Fuiste? — me preguntó y yo asentí con mi cabeza.

—¿Sabias lo grande que es la familia de Abbel? — pregunté con cierta emoción en mi voz, él asintió con su cabeza en respuesta — hicieron una fiesta infantil y todos los invitados eran familiares, ¿puedes creerlo? — a medida que hablaba mi emoción se elevaba él rio — ¿como hacen para tener tantos niños en una misma familia? — pregunte sorprendida a lo que Dan y Abbel soltaron una carcajada, Abbel me abrazo y me dio un beso en la cien.

—¿Así que la pasaste bien? — me pregunto Daniel y yo enérgicamente asentí con mi cabeza.

—Jugué a ... — vacile un poco para recordar el nombre y luego le pregunte a Abbel.

—A las escondidas — dijo Abbel.

—¿Y por que es especial? — preguntó Danny extrañado.

—¡Nunca lo había hecho! — dijo Abbel con mucha sorpresa en su voz, Danny miro sorprendido.

— ¿Como nunca vas a haber jugado a las escondidas? ¿A que jugabas entonces? — Pregunto Danny igual de sorprendido que Abbel.

— No lo sé, no recuerdo — confesé y ciertamente no tengo muchos recuerdos de cuando era pequeña — ni al caso, solo tengo una prima como podría jugar a las escondidas — agregué, Abbel y Danny se miraron y se encogieron de hombros.

— Vamos a la terraza, ahí están los chicos — dijo invitándonos, sin embargo yo mire a Abbel.

— Ve a cambiarte, cielo, te esperamos ahí — dijo Abbel señalando la puerta por la que había salido Danny.

Así que subí al cuarto, quite mi ropa y entré al baño, al pasar por el espejo no pude evitar mirarme y una avalancha de tristeza me invadió, no pude contener mi llanto por lo que comencé a llorar desconsoladamente me metí a la ducha para intentar calmarme pero solo me senté en el piso hecha bolita "debía calmarme, mi cara se marcaría si seguía llorando", era lo único que pasaba por mi cabeza. ¿y ahora que hago? Me pregunté y la respuesta de esta pregunta hizo que mi crisis de llanto se agudizara ¿como haré para decir la verdad? ¿que pensará la mamá de Abbel cuando sepa que engañé a su hijo? ¿me seguirá queriendo? "Obvio que no, Barbi" me respondí.

No calcule cuanto tiempo llevaba pero intente ponerme sobre mis pies y terminar de bañarme una vez mas pasé por el espejo y mi cara no solo estaba roja sino también hinchada, fui al cuarto me vestí y busque en mi bolso mi maquillaje intente disimular un poco el estado real de mi cara y una vez estando tranquila bajé, no había nadie dentro del Loft así que fui hasta la puerta y cuando pasé a través de ella me encontré con que era un balcón que tenían como terraza, había una mesa redonda no tan grande que tenia 6 sillas y un asador, al parecer estaban haciendo barbacoa debatían acaloradamente algo, en el lugar estaba Danny quien estaba alado del asador, Ángel quien estaba asando, Robb que estaba de pies fumando, la novia de Danny que increíblemente seguía siendo la misma, ella estaba sentada al igual que abbel, otra chica y Smile.