17 problemas (Sin corrección)

[28] Quién dice el primer "te amo".

Tiffany's POV

Abro lentamente mis ojos, con la mayor pereza del mundo y sonrío ya que lo primero que me encuentro es con la cálida espalda de Coyi y por sentir sus dedos entrelazado con los míos. Subo un poco mi cabeza para alcanzar su hombro y apoyar mi mentón en él.

-¿Sabías que me encanta cuando te haces el dormido? -digo divertida besando su cuello. Él se remueve girando su rostro a mi dirección.

-¿Sabías que odio que no me dejes dormir lo que quiero? -río leve, se desarma más o menos para poder besarme en la mejilla. -buen día, seguro tu aliento apesta. -le golpeo el hombro con brusquedad y hace una mueca de dolor. -no al maltrato de género rubia.

-Cállate rubio. -me monto a él y lo beso tomándolo por sorpresa.

-Que asco, vayan a un motel que yo quiero dormir tranquila. -dice Lucy y bufo pesado al recordar que ella está en la cama.

-Tu aliento apesta, mejor vamos a desayunar para sacarme este mal sabor a boca. -dice Coyi y me hago la ofendida.

-¿Aunque no te gustan mis besos mañaneros? Pues no tendrás nada en todo el día. -digo poniéndome de pie para luego salirme de la habitación. Puedo oír que me sigue el paso.

Llego a la cocina y me encuentro con Lyna, Mandy, Mery, Pepper, Rose, Alex y Lizz. No estaban haciendo nada, sólo se miraban entre sí muy adormiladas.

-Buen día. -digo cuando estro a la cocina, las chicas sólo me sonríen. Aún siguen molestas conmigo.

-Joder, que hambre tengo. -dice Coyi entrando a la cocina mientras bosteza como un exagerado. -Lyna, Mina, ¡hagamos el desayuno! -dice divertido abrazando a las chicas por el cuello.

-¡Sí! -dicen las chicas a la vez.

-¡Ni lo sueñen! -decimos las demás chicas y yo.

-Aguafiestas. -dicen los 3 dementes que hicieron explotar una cocina.

-¿Y Amber? Tengo hambre. -dice Coyi sentándose al lado de Lyna.

-Anoche fue a la cabaña de los Alfas, no sé con quién se fue a revolcar pero la debe tener grande como para que no regrese aún. -dice Lyna. -¡Muero del hambre y necesito sexo mañanero! -grita la pelinegra exasperada. -Coyi quiero sexo. -le hace un puchero a mi novio y frunzo el ceño.

-¿Y Manolo? -pregunta Pepper.

Sí, se refiere a su mano.

-Dijo que debíamos conocer a otras personas. -dice encogiéndose en hombros.

Ésta chica está loca.

Empezaron a hablar sobre cosas triviales mientras yo solo observaba, me estaban ignorando en grande. No tengo la culpa de... bueno, sí tengo la culpa por haberles ocultado que Lucy seguía siendo Shayaris y que vendría para las vacaciones, pero nunca tuve el tiempo para confesárles la verdad, sentía miedo y más por no superar aún lo que ocurrió el año pasado, me es difícil hacerlo.

Siento que chasquean unos dedos frente a mí trayéndome a la realidad. Era Coyi.

-Vamos a cambiarnos para luego ir a comprar el desayuno o mi estómago se comerá a sí mismo y no podré volver a comer nunca más en mi vida. -dice dramático haciéndome sonreír.

Salto del taburete, él se acerca a mí y me abraza por los hombros. Besa mi cabeza y nos dirigimos nuevamente a la habitación. En el camino estuvo haciéndome bromas de lo desesperado que se pondrá si no le doy un beso en todo el día, yo solo reía y negaba con la cabeza. Al llegar a la habitación, la abrimos como si sólo nosotros la habitamos. Nos llevamos una gran sorpresa...