17 problemas (Sin corrección)

[61] Verdades y mentiras dolorosas.

Tiffany's POV

Una de ustedes no es una Cooper. 

Esas palabras retumban en mi mente mientras que mis, creo que, padres me observaban bastante tranquilos, como si lo que acaban de decir no hubiese sido otra cosa como si comentaran sobre el clima. 

¿Una de nosotras no es Cooper? ¿Pero quién? ¿O acaso...?

—¿Por qué...? —es lo único que logro formular luego de esa revelación. Estoy más que segura de quién están hablando.

Si debo pensar detalladamente mi vida de cuando vivíamos las 3 juntas, puedo encontrar millones de diferencias. Star y Lucy siempre se llevaron mejor, compartían más cosas y parecían confidentes, a diferencia conmigo que me tenían como la tercera en todo momento. Jamás había reflexionado las cosas ya que era una niña, tenía 4 y, ¡vamos! ¿Quién a los 4 años piensa detalladamente su vida? Claro que recién ahora me estoy dando cuenta de ello, antes creía que era porque habían cosas que no podía saber yo por tener 4 años y ellas ser mayores, pero ahora puedo darme cuenta que la sangre también jugó en este caso. 

Quiero decir algo más, algo para no quedar como una idiota, o más de lo que ya debo parecer. ¿Por qué lo ocultaron por tanto tiempo? ¿Por qué se tuvieron que quedar con una niña que no era su hija? 

Y fue así, como en el ambiente, sonaron aquellas 4 palabras que me destruyeron completa, las lágrimas sin pensarlo salieron y sentirme vulnerable fue automático. 

—No soy una Cooper. 

¿Por qué? Diablos, ¿¡por qué!? 

Las hermanas Cooper, Star, Lucy y Tiffany, las estrellas de la noche oscura, la luz del radiante día, la bendición de la vida. Porque las 3 juntas siempre eran un significado que llamaba al mundo para que sepan que no trataban de cualquiera, sino de las Cooper's, de quienes tenían un significado realmente fuerte. 

Observo a mi hermana, sí, hermana porque sin importar lo que acabo de oír, Lucy es una Shayaris y eso la convierte en mi hermana hoy, mañana y siempre. Me sorprende verla así, no tan nerviosa o dolida, que esté fuerte ante la situación, no como yo que quiero desmayarme, en serio no puedo terminar de asimilar la noticia. Si tengo que ser sincera, Lucy siempre fue mi hermana favorita, me hubiese encantado que la que no fuese una Cooper hubiese sido Star ya que como ella nadie nos pudo lastimar tanto, bueno, no teniendo en cuenta lo que nos hicieron estos señores. 

Lucy se sale de la habitación a paso ligero, con la cabeza gacha como si se avergonzara de algo, yo la sigo ya que detesto la presencia de los Cooper's en estos momentos, sólo quiero a mi hermana y a nadie más. 

—¡Lucy! —tomo de su muñeca deteniendo su paso. —¿Por qué te pones así? —pregunto y puedo notar sus ojos cristalizarse. 

—Perdona Tiffa, te lo oculté por más de 2 años. —podía sentir lo quebrada que sonaba su voz.

—¿Perdonarte? ¿Por qué? No fue tu culpa, los que nos engañaron fueron ellos. Pero no me importa, siempre serás mi hermana mayor Lucy. —aprieto mis labios para no llorar y ella niega divertida ante mi gesto. 

—Siempre hacías ese gesto cuando ibas a empezar a llorar, al igual que Star, pero a mí nunca me salió. —podía sentir la melancolía de sus palabras. Joder, ¿en serio Lucy no es una Cooper? 

Así es, Lucy no es una verdadera Cooper. Su familia era Stelezwat, una familia de narcotraficantes que culpa a un problema, tuvieron que regalar a su hija para protegerla. ¿Cómo llegó a manos de mis padres? Digamos que papá le debía un favor y se lo cobró de esta manera, pero ellos jamás la vieron como una hija, cosa que me parece ilógico ya que nunca lo noté.