BREATHE (l.h)

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Me encontraba afuera del apartamento de Luke, parecía como si hace unos días hubiera estado aquí, pero realmente habían pasado tres meses. Ashton me había dicho que el se había ido de la ciudad pero no lo creo, el no pudo haberme abandonado. Lo mas seguro es que el este aquí, se como es de sensible. No es lo suficiente fuerte para haberme visto en coma.

Llame al timbre varias veces.

-¡Luke! –Grite

Quería darle la sorpresa de que por fin ya estaba de regreso. Un vecino venia caminando, llame su atención y se paro a saludarme. Creo que lo conozco de vista.

-¿Eres la novia de uno de los que vivía aquí? –me pregunto el joven.

-Si... hace tiempo que no venia por aquí.

-Bastante, ellos ya no viven aquí. Desde hace unos meses ya no les he visto.

La sonrisa en mi rostro se borro al escuchar eso. Así que era cierto, se habían ido...

(....)

-No debiste salir sin decirme, hace unos días apenas saliste del hospital. Pudo pasarte algo....

No me podía concentrar en los regaños de mi padre. Yo solo pensaba donde podría estar Luke.

-Estoy bien. Estuve tres meses en coma, ya fue suficiente descanso. –exclame tranquila.

Mi padre vivía ya en otra ciudad, pero por estos días nos estábamos quedando en la antigua casa de su novia. Se que pronto tendría que mudarme con ellos, pero antes debía saber algo de Luke, mi esposo.

-Debo ir al trabajo a firmar unos contratos. Mañana nos iremos de aquí, para que te despidas de Ashton.

-¿Qué? Tu dijiste que hasta la próxima semana. –exclame preocupada.

-Tranquila, Zara.

La cara de mi padre se transformo del enojo a la preocupación, puso una mano sobre mi hombro y juro que casi iba a llorar.

-No quiero que te pongas mal, se lo mucho que quieres estar aquí. Pero necesitas.... –suspiro. –Aquí ya no tenemos nada que hacer, te prometo que te traeré aquí las veces que quieras. Eres mi hija y haré todo para cuidarte.

No me gustaba que mi padre sonara así, algo andaba mal para que el se ponga así. Probablemente eso tenga que ver conmigo.

-Puedes invitar a Ashton a cenar. –beso mi frente y me abrazo.- Te quiero mucho, Zara.

Salio de la casa dejándome sola de nuevo. Le mande un mensaje a Ashton, el acepto la invitación, no le conté nada sobre que mañana me iría. Preferiría decírselo de frente.

Subí por las escaleras, aunque aquí no me había accidentado, fue inevitable no tener un flashback cuando estaba cayendo con Kate.

Kate, ¿Qué había sucedido con ella después del accidente? Nadie me dijo que tan grave estuvo ella.

Entre a mi habitación, y me quede observando el cuarto. No, esto no debía mi vida. Yo necesitaba a Luke a mi lado, el lo prometió.

-Tu nunca rompes tus promesas, Luke.

Marque el numero de celular de Luke, ya me lo sabia de memoria. Me mandaba a buzón, me canse a las veinte llamadas fallidas.

Suspire y me senté en la orilla de la cama. Tenia toda mi ropa en maletas, recordé que tenia unas camisas de Luke. Sonreí, el se molestaba porque no se las devolvía pero sabia que en el fondo le gustaba verme usarlas de pijama. Me acerque a una maleta y rebusque entre la ropa hasta encontrar una, lo primero que hice fue inhalar su perfume. Aun olía a el.

-Luke, regresa. –dije entre lagrimas.

Rápidamente busque en el cuarto un cuaderno y una pluma. Encontré lo que buscaba, me senté en el escritorio y comencé a escribir.....

(.....)

Todos terminamos de cenar. Ashton y yo salimos de la casa a caminar por las calles en esta noche que proyectaba una hermosa luna. Debía darle la mala noticia a Ashton por mucho que me duela.

-Mañana me iré. –vaya forma la mía de decírselo.

El volteo a verme rápidamente para seguir mirando hacia el frente.

-Mi padre me dijo apenas hoy que mañana nos iríamos, parece desesperado por irse.

Ashton asintió tranquilo.

-Yo no quiero irme, no quiero dejarte. No después de todo lo que has hecho por mi.

El no decía nada ni se reflejaba nada en su rostro.

-¿Ash? –pregunte preocupada.

-Esta bien, lo entiendo. –dijo sin mirarme.

-¿Solo eso dirás? –comenzaba a molestarme su actitud indiferente.

De nuevo no dijo nada.

-¿Que te sucede Ashton? Hoy no has estado tan risueño.

Volteo a verme con los ojos llorosos.

-Ya lo sabia.

-¿Te lo dijo mi padre? –exclame

-Si, me lo dijo apenas ayer.

-De nuevo me están ocultando cosas, saben lo mucho que me molesta eso.

Me comenzaba a suceder algo inusual, sentía que tendría un ataque, solo que estaba vez venia de la nada. No era como mis típicos ataques.

Comencé a respirar de prisa, Ashton de inmediato me abrazo de la cintura por si me caía.

-Zara, vamos a tu casa. ¿Puedes caminar? –me pregunto preocupado.

-Solo necesito sentarme.

Me ayudo a sentarme en la banqueta, estaba inhalando y exhalando profundamente.

-No soy el pero,  tranquila, Zara. Respira.- me dijo Ashton.

Voltee a verlo con los ojos llorosos. No quería recordar a Luke a través de Ashton, mucho menos sentir algo mas que una amistad.

Pasaron unos minutos y logre estabilizarme mejor con ayuda de Ashton que en todo momento me tenia tomada de la mano.

-¿Estas mucho mejor?

-Si.

soltó mi mano y vi que miraba hacia otra dirección, hasta que por fin me miro de nuevo.

-Zara, no puedo esperar a hacer algo....

-Solo hazlo, Ashton. –le respondí volteándolo a ver.

Se acerco a mi, coloco su mano en mi mejilla con su dedo gordito acaricio lentamente la comisura de mi labio. Pude tener tiempo de alejarme, pero no quería.

Miro mis labios y después mis ojos, me sentía tímida al saber lo que haría. Se inclino y ya no nos separaba esos escasos centímetros de nuestros labios. Me beso con cuidado, sus labios se movían lentamente igual que los míos. Puso su otra mano en mi mejilla. Besar a una persona diferente era un poco extraño, sus labios se sentían suaves y sabían a vino tinto.

-Me gustas mucho, Zara. –dijo cortando el beso.

No pude responder nada. De nuevo se inclino y volvió a besarme.