El Boxeador Es Mio

ocho -Adiós-

Mas de un año atrás...

Le di los últimos retoques a mi platillo de prueba y me coloqué derecha para contemplarlo con orgullo. Mi maestra se colocó frente a mi con una expresión seria y tomó nota de mi platillo, luego tomó la cuchara y probó, sonrió y me felicitó. Suspiré de alegría y me quité el delantal para salir del salón.

Era un viernes y tenia planes de ir con Zack a ir al cine. Esperé en el estacionamiento y, para matar el tiempo, saqué mi folio con fotos y recetas para esta semana y las supervisé.

Mi ojos fueron cubiertos por grandes y calientes manos, Sonreí al tener una sospecha de quien era.

–Peter —dije y quité sus manos de mi visión. Se sentó a mi lado dándome un beso en la mejilla.

–hola, preciosa. Por la cara que tienes puedo descifrar que hiciste un rico pastel hoy.

–¡si! Estaba nerviosa porque nunca había hecho un tiramisu pero me ha quedado mejor de lo que pensé —dije animada mientras cerraba mi folio y lo guardaba en mi mochila.

–me alegro mucho, Jade —murmuró nervioso. Carraspeo —oye, quería saber si... Podriamos salir un día. Ya sabes, hablar de cosas que no sean solo la universidad.

Sus manos estaban impacientes y trató de disimularlo rascándose la cabeza y jugar con las llaves de su auto.

me quedé en blanco por unos momentos, nos habíamos conocido y me parecía un chico realmente lindo. Podría decir que he empezado a sentir algo por él... No sabia si era amor...

Mi mente recordó a Harry y al último mensaje ignorado que le mandé...

–claro, es una buena idea —Sonreí entusiasmada cuando el auto de mi hermano apareció en mi campo de visión. Nos levantamos —, ¿que te parece el viernes después de clases?

–esta bien —respondió despidiéndose con un abrazo y se fue.

Al regresar del cine me lancé en mi masa y vi fijamente al techo pensando. Hace meses que había decidido no volver a escribirle a Harry, ya era tiempo de superarlo y entender que lo nuestro no era para siempre.

Saque un bufido irónico al pensar que tal vez nosotros estaríamos juntos para toda la vida.

Mis sentimientos por Peter estaban floreciendo, creo que debería de darle la oportunidad.

Me levanté rápidamente y tomé mi computadora para entrar a Facebook. Probablemente iba a ser una estupidez pero tenia que hacerlo, darle una ultima oportunidad de responder.

Yo: Hola de nuevo, puede que crees que sea una patética al seguir insistiendo (yo lo creo) pero esta vez es serio. Conocí a un chico, es lindo y amable conmigo. No sé si esto realmente llegue a interesarte pero quería que lo supieras y decirte que aún hay tiempo para que me respondas y me digas si aún me amas o ya me has olvidado. Si no respondes daré por sentado que me has olvidado y eres feliz. Quiero darme una oportunidad también de ser feliz, así que haz lo que quieras. Cuidate.

Cerré mi computadora de golpe y maldije al ser tan estúpida, debí de haber pensado eso dos veces. Sabiendo que no tendría respuesta me acomodé en mi cama nuevamente y vi mi serie en netflix.

Ahora.

Al día siguiente después de la fiesta que tuvimos Salí en busca de comida para mis primos, quienes estaban tirados en cama con una buena resaca. Bajé del autobús y camine hasta el supermercado. Tome una carreta y entre al edificio con los audífonos puestos y la música alta. Ásando ne la sección de lácteos choqué por accidente con otra chaqueta, el choque probcó que me tambaleara para atrás y me arrebaté los audífonos para empezar a pedir perdón.