El Boxeador Es Mio

capítulo 8

deslicé el cepillo en mis lagos cabellos ondulados mientras una melodía salia de mi teléfono, estaba casi lista. Cuando mi cabello quedo perfectamente peinado tome mi teléfono y sali del baño arrastrandome hasta mi cama para colocar mis zapatos dentro de mis pies.

Habia estado toda la tarde en cama,cuando Sam me llamo no le preste la más minima atención, incluso cuando recibí sus protestas por no haberle avisado que mis primos se fueron hoy. Hoy no fue un día como lo podia esperar, en realidad no fue una buena semana.

Apagué el sonido que emitia mi teléfono y me levante para rociar un poco se perfume en mi cuello y parte de mi torso. Me heche un vistazo y tome mi bolso que descansaba en mi cama y me puse en marcha hasta el piso inferior de mi casa. Mi madre estaba comodamente descansando el sofá viendo la gran pantalla frente a ella que presentaba laa noticias de último momento. Me quede silenciosa en las gradas mientras esperaba alguna señal de Harry.

Minutos muy largos pasaron y por fin escuche el ruido de un auto perqueandoce cerca de mi casa, recibí un mensaje de Harry el cueal no decia mas que una palabra "sal". Ajuste mejor mi bolso en mi hombro y me acerque a mi madre depositando un beso en su cabeza y despidiendome cuando tome la manija de la puerta y sali dejando que el viento golpeara suavemente mi cuerpo. Vi el auto, una camioneta negra marca BMW forrada con polarizado en las ventanas. Por un momento me cuestione si era la camioneta de Harry pero en ese mismo segundo lo vi salir de la puerta del piloto y rodeando su auto hasta llegar a mi. Me sonrió coqueto y depósito un beso en mi mejilla la cual no tardo en teñirse de un suave rojo.

-hola nena -me guiño un ojo y me empujo delicadamente hasta la puerta del copiloto. -sube, prometo no hacer nada malo... amenos que quieras -un tono divertido viajo junto las palabras. Preferi dejarlo pasar y me monte en el auto.

Vi como Harry caminaba un poco mas rápido hacia el otro lado del auto. Abrió la puerta y se deslizo perfectamente acomodando los pies en los pedales y encendiendo el auto. Giro a verme sin darme cuenta que yo lo habia visto detenidamente hace unos pocos segundos, me sonroje y baje la mirada mientras colocaba mi cabeza en la ventana polarizada escuchando una pequeña sonrisa complaciente de parte de el.

- dime ¿a donde vamos? -intente dejar el silencio incómodo que se formó cuando el arranco y acelero fuera de mi calle.

-si te digo perdería la chispa de sorpresa -giro a verme solo por unos segundos para luego enfocarse en el camino.

-dime -dije mientras me crusaba de brazos.

-no.

-almenos dime si estoy vestida adecuadamente -el me vio examinandome por unos pequeños segundos, enfoco su mirada nuevamente al camino y sonrío.

-mas que perfecta, esas sandalias estaran perfectas -me alago y yo me sonroje pensando en donde era el tan esperado lugar.

Los minutos pasaban y yo no paraba de hablar con el era increíble como es que después de tantos alagos y coquetería siga intentando entablar una conversacion con el.

Estabamos ya lejos de la ciudad y empecé a invadirme de miedo, me relaje al escuchar las olas del mar en el momento que baje la ventana. Era muy tarde para ir a un lugar como la bella playa de Londres.

-¿la playa? -pregunte girandome hasta divisar su bello y perfecto perfil.

-adivinaste -sonrió -es una fiesta de unos amigos, espero no te moleste.

-no me gustan mucho las fiestas pero suena divertido -sonreí, me asuste por un sonido a mi lado de la puerta pero me calme al saber que era el vidrio subirse hasta ya no poder mas gracias al botos que estaba presionando Harry.