«La sabiduría es la meta del inteligente, pero el necio no tiene meta fija» (Proverbios 17:24).
LECCIÓN.
Suelo comparar a las personas sin metas como hojas secas que caen de un árbol para ser llevadas sin rumbo por el viento hasta que aterrizan en un riachuelo donde irremediablemente se hunden. ¿Demasiada drástica esta comparación? Juzgue usted, aquí va la lección de hoy.
Las metas son un timonel, un manubrio, una especie de brújula que guía nuestro destino hacia el futuro, pero si no tienes metas eres un necio ––lo dice la Biblia––, y se cumple entonces lo que Séneca enseñó cientos de años atrás: "Para el que no sabe para donde va cualquier camino es bueno". Por eso una de las mejores cosas que podemos hacer en esta vida es plantearnos metas, cuando lo hacemos y luchamos por conquistarlas llegamos a convertirnos en personas sabias. En resumen: Tener metas nos abre un mundo de posibilidades.
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DE MADRUGADA CON DIOS
SpiritualEn esta obra --en construcción-- agrupo las reflexiones que a diario publico en mis cuentas sociales a primera hora de la mañana, por lo general en las madrugadas, de ahí el nombre del libro. He venido subiendo estas reflexiones desde hace meses en...
