«Te he dado honra aquí en la tierra, porque he terminado lo que me dijiste que hiciera» (Juan 17:4).
Hay personas que inician proyectos, estudios, negocios, relaciones, sociedades, empresas pero no terminan; es como el viejo refrán que dice, "carrera de caballos, parada de burro". Cuando iniciamos algo por más difícil que sea y lo acabamos es una forma de predicarles a nuestros amigos que con la ayuda divina podemos emprender cualquier cosa porque Cristo nos da la fuerza para completarla (Filipenses 4:13). En cambio las tareas inconclusas nos cansan, las situaciones no resueltas nos alcanzan, las decisiones no tomadas nos agobian..., y todo esto resulta en mal testimonio "para los de adentro y los de afuera". Además, cada vez que no terminamos algo se desmorona un trocito de nuestra auto-confianza, en cambio concluir las tareas la re-afirma.ORACIÓN: Ayúdanos Señor a culminar la carrera por más cansados que estemos. Danos fuerza, disciplina y pasión para "terminar lo que empezamos y hacerlo bien". ¡AMÉN!
ESTÁS LEYENDO
DE MADRUGADA CON DIOS
SpiritualEn esta obra --en construcción-- agrupo las reflexiones que a diario publico en mis cuentas sociales a primera hora de la mañana, por lo general en las madrugadas, de ahí el nombre del libro. He venido subiendo estas reflexiones desde hace meses en...