DÍA 83: Lodebar no es para siempre

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«Y el rey David le preguntó: —¿Vive todavía algún familiar de Saúl? Dios ha puesto en mi corazón un gran deseo de ayudarlo. Sibá le contestó: —Aún vive un hijo de Jonatán, que no puede caminar. Se llama Mefi-bóset. David le preguntó dónde estaba, y Sibá le respondió: —Vive en Lodebar, en la casa de Maquir hijo de Amiel. El rey mandó traer a Mefi-bóset» (2ª Samuel 9:3-5).

LECCIÓN. 

¿Hay alguno viviendo en Lodebar por estos días? Lodebar era una aldea israelita donde residían los que habían perdido toda esperanza de vida: los tristes, enfermos, condenados a muerte. Lodebar significa: sin fruto, tierra estéril. 

Si estás viviendo en Lodebar escucha esto: Ese lugar no es para quedarse. El dolor, la tristeza, el cansancio del alma si bien son parte de la vida no son para siempre. En algún momento Dios te mandará a llamar, tal como lo hizo David con Mefiboset. Él te sacará de ese tormento, te dará la salida, el oportuno socorro vendrá a ti de la manera menos esperada, ¿qué debes hacer mientras esperas que eso ocurra?  Mantén la esperanza y repite en tu mente: en cualquier momento mi Rey me sacará de aquí, ¡Lodebar ya va a pasar!

DE MADRUGADA CON DIOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora