«En la casa del perezoso pasan muchas desgracias: primero se cae el techo, y después toda la casa» (Eclesiastés 10:18).
¡Qué fantástica verdad nos enseña el sabio Qoelet! Aquí aprendemos que los flojos, los vagos, los ociosos, los perezosos siempre acarrean desgracias para así y los suyos. Pero, ¿qué es la pereza? Un diccionario la define así: "La pereza es un término que procede de 'pigritia', un vocablo latino. Puede emplearse para nombrar a la 'desidia' o a la flojera que lleva a las personas a no poner empeño o a no desarrollar ciertas tareas que debería cumplir". En otras palabras el perezoso sabe perfectamente lo que debe hacer ––trabajar, estudiar, vender, orar, etc.––, pero decide no hacerlo a pesar que ello le prive de los beneficios de dichas acciones.
Sacúdete la flojera, súbete al techo y repáralo antes se caiga: ora temprano, lee la Biblia, asiste a la iglesia, trabaja con ganas, estudia con buena actitud, persiste en tu emprendimiento. Y recuerda: LOS PEREZOSOS NUNCA PROSPERAN, a ellos siempre "se les cae todo".
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DE MADRUGADA CON DIOS
SpiritualEn esta obra --en construcción-- agrupo las reflexiones que a diario publico en mis cuentas sociales a primera hora de la mañana, por lo general en las madrugadas, de ahí el nombre del libro. He venido subiendo estas reflexiones desde hace meses en...
