Día 183: Lo justo y necesario

15 0 0
                                    

«Tráeme aún otras vasijas. Y él dijo: No hay más vasijas. Entonces cesó el aceite» (2ª Reyes 4:6).

Cada vez que leo el relato del "milagro del aceite de la viuda" extraigo más y más lecciones. No voy a comentar todo el pasaje porque ya lo he hecho anteriormente por medio de predicaciones y estudios, quiero concentrarme en el versículo que encabeza este devocional.

¿QUÉ APRENDEMOS? El Dios al que servimos está más que dispuesto a bendecirnos, protegernos, cuidarnos y proveernos; pero su sustento jamás será más de lo que necesitamos. Él no desperdicia recursos, no bota las provisiones, "no guarda en la despensa", es un Dios sabio que nos da el aceite justo para salir de esa adversidad. No desconfíes, la provisión del Señor es perfecta, Él llega a tiempo, nunca se atrasa y jamás se queda "corto".

DE MADRUGADA CON DIOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora