"Porque será medicina a tu cuerpo, Y refrigerio para tus huesos" (Proverbios 3:8)
LECCIÓN.
La salud es uno de los recursos que hoy más se ha perdido a nivel mundial, los cristianos no son la excepción. Padecimientos de todo tipo abundan por doquier y cada día aparecen nuevas y más catastróficas enfermedades; sin embargo hay un remedio infalible para tan horroroso flagelo: RESPETAR A DIOS Y APARTARSE DEL MAL (esto lo vemos en Proverbios 3:7).
Cuando uno se hace amigo de Dios, cuando obedece su Palabra, cuando procura buscar el bien y apartar de su vida el pecado ––en todas sus formas––, el resultado es inevitable: SALUD INTEGRAL. Así lo declara el adagio semita..., ¡hasta los huesos mejoran!
Yo quiero ser sano, quiero que mi mente, alma, cuerpo y espíritu gocen de buena salud y la solución a ello es simple: acercarme a Dios porque al hacerlo Él lo hará también y así mi ser entero mejorará.
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DE MADRUGADA CON DIOS
SpiritualEn esta obra --en construcción-- agrupo las reflexiones que a diario publico en mis cuentas sociales a primera hora de la mañana, por lo general en las madrugadas, de ahí el nombre del libro. He venido subiendo estas reflexiones desde hace meses en...
