Un saludo para La Mongola, de parte de Gabriel. Xd
Emma
Escuche que alguien toco mi puerta. Esperaba que no sea mi padre por que sinceramente no quería que me viera en este estado.
—Emma—reconocí la voz de Gabriel. Me levante y abrí la puerta— ¿Qué pasó?—preguntó al verme.
—Nada importante.
—No me mientas. Dime que paso.
No lo resistía, esto era demasiado para mi. Me refugie en sus brazos. El solo me acariciaba el cabello sin entender lo que me sucedía.
—Gabriel... Solo te tengo a ti.
Los dias transcurrían. Gabriel había vuelto a asistir a la universidad pero algo en el estaba diferente. Ya no era tan social como lo era antes, ahora solo se dedicaba a estudiar y estar a solas todo el tiempo, incluso empezó a faltar a sus clases de baloncesto.
Supuse que se trataba por Alex pero mi sorpresa fue grande al enterarme que Violetta y Gabriel habían terminado. Quise saber el motivo pero ninguno de los dos me lo daba. Violetta había cambiado, ya no estaba tan cerca mio como de costumbre. Había elegido otro grupo de amigas, es mas me había apartado de ella prácticamente.
Respecto a Alex, desde esa vez en el hotel no volvimos ha hablar. Las veces que lo veía solia estar acompañado por varias jóvenes de la universidad entre ellas Violetta.
—¿Iras a la fiesta?—preguntó Ángel mientras observaba como acomodaba mis libros en el casillero.
—No lo se.
—Trata de ir, mas que todo hazlo por tu hermano. Suele animarse mucho cada que hay una fiesta, pero esta vez fue diferente.
—¿Enserio?
—Usted deverian divertirse después de todo. Se lo merecen.
—Tal vez tengas razón. Hablare con mi hermano, quizá lo convensa de ir.
—Genial, te veo luego—dijo alejándose.
Si, ¿por qué no? Lo que Gabriel y yo necesitamos es divertirnos después de todo lo que pasamos.
Al llegar a casa me topé con papá, ¿no se supone que debería estar en el trabajo?
—¿Qué haces aquí?—pregunté.
—Regrese temprano.
—¿Por qué?
—Iré a hablar con tu madre. Necesitamos aclarar las cosas.
—¿Crees que ella quiera verte?
—Sin importar que, lo haré.
Eso me hizo recordar a Alex. Comenze a sentirme mal, odiaba sentirme así.
—Suerte—en verdad quería que arreglaran las cosas, no soportaría que mi familia se desintegre por completo. Espero que todo esto tenga solución.
Al ver a mi papá salir de la casa subí a mi habitación a bañarme pero me di con la sorpresa de encontrar a Gabriel a un rincón de mi habitación sentado.
—¿Gabriel? ¿Qué haces aquí?
—Me sentia solo.
—Pero no lo estas.
—No tengo ganas de nada.
Recordé lo de la fiesta. A lo mejor si insisto podría ir conmigo a esa fiesta.
—Pues... Queria pasar mas tiempo contigo.
—¿Conmigo?
—Si, mañana habrá una fiesta. Quiero que vayas conmigo.
—¿Enserio? ¿quieres ir a una fiesta?
—Si es contigo si.
Gabriel sonrió me alegró tanto verlo así que de igual manera sonreí.
—Entonces iré.
—Eso es genial—me lancé a abrazarlo.
—Pero promete que no te apartaras de mi.
—Lo prometo.
Recibí una llamada mientras abrazaba a mi hermano. Vi la pantalla era Andrés.
—¿Es Andres?—preguntó mi hermano viendo la pantalla del celular.
—Si.
—¿Qué esperas? contesta.
Si antes Gabriel estaba alegre ahora estaba más que alegre de saber que Andrés estaba llamando a mi celular.
Me aparté un poco de Gabriel y tomé la llamada.
—Hola—dije un poco tímida.
—Emma—dijo tras la linea—Estoy de regreso.
Feliz cumpleaños Sandra, deseo que la pases muy bien. Perdón si actualicé tarde.
