Emma
Gracias a Daniel se supo la verdad sobre mi relación con Andrés. Hubiera preferido esperar para contárselo a mamá primero, pero las cosas no salieron según lo planeado.
A mis padres le simpatisaban Andrés, pero les incomodaba el hecho de que tuviera enamorado, pero ya que conocían muy bien a Andres aprobaron la relación.
Los padres de Andrés también la aprobaron, con la condición de que nuestra relación no perjudique mi estudio ni el trabajo de Andrés. Todo estaba bien, más que bien.
Antes de dormir recibí un mensaje de Andrés: Descansa mi princesa. Sonreí al leerlo. Andrés era muy tierno conmigo, tanto que tenia ganas de tenerlo a mi lado en este momento.
-Ya deja el celular y duerme-dijo mamá desde la puerta.
-¿Te quedaras a dormir?-pregunté, eran las 11 de la noche, podría ser peligroso que una mujer embarazada ande a estas horas en la calle.
-Si, no puedo arriesgarme-contestó, me alegre al que piense así, mamá pasaría esta noche con nosotros.
-¿Dormirás con papá?
-Lo pensaré-dijo para luego apagar la luz e irse de la habitación. Esperaba con ansias de que así sea, seria bueno que ambos duerman juntos.
Gabriel
Al despertar me dirije a la cocina a desayunar, hoy era sábado así que no habían clases. Al entrar a la cocina lo primero que vi fue a mi madre, «¿Qué hace aquí? Acaso....»
-¿Pasaste la noche aquí?-pregunté.
Ella miró a papá y asintió.
-Papá durmió en la sala-comentó Emma mirando su plato de cereal.
-Ah, eso lo explica todo-agregué sentándome en la mesa junto a Emma.
Al terminar de comer me ofrecí a lavar los platos por mamá. Era mi primera buena acción del día. «Nos vamos para el cambio»
Al terminar me dirije a mi habitación, al revisar mi móvil leí un mensaje de Ángel preguntando si iría a una fiesta. No me habían invitado así que dije que no. Dudo mucho que permitan mi presencia en esa fiesta después de como me trataron.
-Gabriel-dijo mi hermana entrando a mi habitación-Andrés quiere salir con nosotros esta noche ¿Qué dices?
-Mmmm... Déjame ver mi agenda....Si, voy.
-Genial, le diré que aceptamos.
Emma
Andrés quería llevarnos a un karaoke junto a sus hermanos. Lo había reservado para toda la noche así que en pocas palabras era todo nuestro.
Por primera vez en la vida me puse un vestido corto y apegado, quería llamar la atención de Andrés pero también me preocupa lo que pudiera pensar de mi al verme así vestida.
Al llegar las 7 de la noche el auto de Andrés ya se encontraba afuera esperándonos. Baje con cuidado de no caerme, le pedí ayuda a Gabriel pero el maldito me ignoró.
-Andrés-dijo Gabriel lanzándose en sus brazos.
-Hola Gabriel-dijo sonriendo. Gabriel entró al auto dejándome asolas con Andrés-Te vez hermosa-dijo mirándome de pies a cabeza.
-Gracias-dije sonrojada.
Andrés estaba apunto de besarme pero el sonido de la bocina lo interrumpió.
-Oigan, dense prisa, el karaoke nos espera-dijo Daniel tras el volante.
Andrés me tomo de la mano y me ayudo a entra al auto.
Al llegar el karaoke estaba vacío y lleno de bocadillos y bebidas, todo solo para nosotros. Daniel fue el primero en probar el karaoke, canto una canción en inglés la cual tenía un agudo muy fuerte al final, lamentablemente Daniel hizo que nuestros oídos quedaran sordos.
-Ya bajenlo de ahi antes de que buena a cantar-comentó Michael.
Daniel le dio el micrófono a Gabriel. Nunca lo había escuchado cantar imagino que por lo menos romperá todos los vidrios.
Gabriel
Daniel me pasó el micrófono. Nunca había cantado en un karaoke, pero siempre hay una primera vez para todo.
-Canta I Will Survive-gritó Michael desde el fondo.
-Bien. Se lo dedico a la zorra de mi ex novia-dije.
-¡Así se habla!-gritó Michael.
Emma
Gabriel comenzó a cantar, su voz era muy afinada y linda. No esperaba que cantara tan bien. Cantaba con sentimiento, le cantaba a Violetta, ella en verdad lo lastimó demasiado.
-¡Bravo!-gritó Daniel aplaudiendo-¡Hermoso!
Gabriel se sonrojó y sonrío bajando del escenario. Se dirijo a la barra de bebidas y tomo una copa de licor. Estaba apunto de levantarme a quitarle la copa pero Andrés me detuvo tomándome de la mano.
-Dejalo-me dijo en voz baja.
Mire a Gabriel y lentamente volvi a sentarme.
Gabriel
Tomé toda la copa de licor y me serví otra. Podía escuchar a Daniel cantando la canción favorita de Violetta, eso me incomodó bastante. La amaba pero al mismo tiempo la odiaba.
Me voltee a ver a Emma, ella estaba recostada en el hombro de Andrés, ambos se tomaban de las manos, estaba celoso, celoso de su felicidad. Quería desaparecer, quería estar solo así que me levante de la silla y camine hacia la salida.
Comenzaba a hacer frío y mi chaqueta estaba en el auto, lamentablemente no tenia la llave para abrir las puertas del auto y sacar mi chaqueta así que seguí caminando.
Me dirije a la fiesta. Mire por la ventana y lo primero que vi fue a ella en brazos de Alex. Ambos reían y se abrazaban, eran felices, el la hacía reír, su sonrisa era diferente a la que tenia cuando estaba conmigo. Eso me dolió.
Tome una decisión. Entre a la casa, empuje a todos abriéndome paso hasta llegar donde la feliz pareja y lo golpee en la cara. Violetta me miró asustada y al ver como tire al suelo a su amado. Me giré y segui caminando, divisé en el sofá una polera, la tomé y me la coloqué a medida salia de la casa.
Me coloqué la capucha y seguí caminando. Al menos me sentía abrigado.
Caminé hasta llegar a una gasolinera. Había una pequeña tienda, moría de sed pero no tenia dinero, lo había olvidado en mi chaqueta.
Entre a la tienda, recorrí los pasillos hasta encontrar la sección de bebidas. Revise los bolsillos de la polera con la esperanza de encontrar dinero pero no encontré nada. Enserio tenia sed, miraba la botella de agua como un mendigo.
-Oye-una voz llamó mi atención, era Jane.
Me miro y se acercó a mi, me arrebató la botella de las manos y la metió a su mochila
La mire asombrado al ver como salio de la tienda sin siquiera pagar por la botella. Salí de la tienda, ella estaba afuera al pie de la gasolinera esperándome. Me acerqué y me entregó la botella de agua.
-¿Qué?-preguntó al ver como la miraba.
-Acabas de robar.
-¿Y eso qué?-dijo encogiéndose de hombros-¿Quieres la botella o no?
Afirme con la cabeza. Ella se bufó de mi comportamiento y siguió con su camino. Quise seguirla y lo hice.
Al parecer no notó que la seguía. Camino hasta llegar a una pequeña casa abandonada al pie de un basurero. Me escondí detrás de la pared de una casa y la vi entrar.
Al verla entrar me acerque a la puerta de la pequeña casa. Vi que la puerta estaba mal cerrada así que no dude en entrar.
Al abrir la puerta algo se abalanzó sobre mi logrando tirarme al piso.
«Ay no, otra vez ese maldito perro»
