Había pasado un año, y tal y como la tía Alice había dicho, Emma resultó teniendo trillizas. Me había encariñado tanto con ellas que esperaba tener mis propios trillizos. Y solo tenia que esperar algunos meses puesto que Jane ya se encontraba embarazada. Era una larga historia. Resulta que mis padres se encontraban molestos conmigo y ni hablemos de la tía Maria, que al enterarse quiso apuntarme con un arma.
Jane tuvo que abandonar sus estudios por un tiempo, por lo menos hasta que naciera el bebe. Era un varón, y al parecer había sacado mucho de mi puesto que el embarazo de Jane se veía muy complicado. Estábamos por casarnos, pero eso seria después de que el bebe naciera.
—Gabriel—dijo mi hermana con una de sus trillizas en brazos—. Mamá te llama, dice que la ayudes a preparar la comida para el baby shower.
—Ay... pero estoy cansado—dije tirándome en la cama.
—Apúrate—dijo al salir.
Emma se había vuelto muy espesa con eso de ser mamá. Había comprado una casa cerca a la de los padres de Andres, pero no paraba mucho ahí puesto que se sentía sola cuando Andres viajaba, así que solía estar en casa de sus suegros y así recibir ayuda con la crianza de las niñas.
Jane había invitado a Alex y a Kiara, la novia de Alex. Me preguntaba como se vería Emma al ver a su ex. Era algo que no me perdería.
—Te ves hermosa—dije al ver a Jane sentada en el mueble junto a su madrina.
—¿Ya estas preparando la comida? Tu madre te esta esperando.
—Ya voy—rodé los ojos—. Pero dame un besito.
—No molestes.
Jane me había agarrado cólera. Me resultaba bueno y malo a la vez. Bueno porque eso significaba que el bebé saldría idéntico a mi, y malo porque ahora me la pasaba durmiendo en el sofá.
Al tener la comida lista subí a mi habitación a bañarme. Estaba emocionado aun que algo avergonzado puesto que en el baby Shower de Emma el animador había hecho que Andres se pusiera unos pañales y actuara como si fuera un bebe. Eso fue divertido, recuerdo haber molestado a Andres con eso por dos meses, y ahora me atacaba el Karma.
Los invitados empezaban a llegar. Y entre ellos el tío Manuel y la nueva tía Miranda. Jamas pensé que la llamaría tía después de haberla llamado bruja cada que iba a su casa a molestarla.
—Gabiel—me dijo Camila—. Caramelo.
—No tengo—dije arrodillándome.
—¡Si tienes!
—¡Que no tengo!
—¡Si!
—¡No!
—¿No te da vergüenza pelear con una niña?—me dijo la tía Maria— Toma tesoro—dijo dándole una paleta a mi hermana.
—Hola tía querida, se ve radiante.
—No me vengas con adulaciones. Aun no te perdono por lo de mi Jane.
—Ay... solo espere a que nazca y verá como se derretirá de amor por su sobrino.
—Gabriel—dijo Jane—. Tu hermana quiere que la ayudes con las trillizas, necesita hablar por teléfono con su esposo. Esta en camino.
—Claro.
Y como era de esperarse ocurrió algo, y esta vez no lo había ocasionado yo. Bueno, en parte si, ya que era el responsable del niño que había dentro de Jane.
—¡Carajo!—dijo Jane asustada.
Mire al suelo, y casi me desmayo al ver todo el liquido que sabia de Jane.
—¡Oh mierda!—grité— ¡Mamá! mi hijo ya viene.
Mis gritos llamaron la atención de los invitados, quienes preocupados se preguntaron que estaba sucediendo.
Mamá logró calmarme, y junto a la tía maría y papá fuimos rumbo al hospital.
Mamá consiguió que me dejaran estar presente en el parto y grabara todo, pero con toda la angustia y emoción al ver la cabecita de mi bebe salir terminé desmayandome en pleno parto.
Al despertar me vi en una camilla al lado de la de Jane. Todos estaban ahí, incluso Andres, Alex y Kiara. Todos estaban felices.
Me levanté de la camilla y al acércame a Jane besé su frente con una amplia sonrisa que me ocasionaba mi pequeño bebe.
—¿Como lo llamaremos?—me preguntó Jane sonriendo.
—Me gusta Lucas.
—Es perfecto.
Por que ustedes lo pidieron!!!! <3 <3
Gracias c: mil gracias.
