Cuando entro a mi departamento me quito los zapatos y lo primero que hago es tirarme en el sofá. Me siento un poco abrumada por todo lo que paso hoy. No puedo creer que me desmaye, pero de verdad lo que menos esperaba, era la reacción de mi jefe. Pensaba que me iba a mandar de patitas a la calle. Ahora pienso que no es tan malo como intenta parecer.
Reviso mi celular y le mando un audio a Chloe.
—Hola Chlo. Lo siento de verdad, se que tienes razón. Hoy me desmayé, esta semana no comí, tampoco pude dormir casi nada y me paso factura. Estoy bien, fue en la oficina, mi jefe fue bastante considerado y me trajo a casa. La estoy pasando fatal con todo esto y los extraño, especialmente a ti. Ya sabes que no sé que hacer sin ti. Tratare de estar más pendiente del celular y antes que me lo pidas, te prometo que intentare ser mas consiente y cuidarme un poco más. Te quiero.
—¿¡Como que te desmayaste!? ¿¡que te paso!? ¡Después me dices que no me preocupe! ¿estás bien? ¿Qué te dijo tu jefe? Yo también te extraño. Ni, no te molestes, pero ¿Por qué no piensas en regresar? Que estés allá sola no le hace bien a nadie.
Se que estar sola no es precisamente lo mejor para mi, pero ella sabe que no puedo regresar, no es una opción.
—Chloe tranquilízate, estoy mejor. Mi jefe se portó mejor de lo que yo esperaba, me llevo a comer y me trajo a casa. Se que tengo que tener más cuidado, pero no voy a regresar. Sabes que eso para mí no es una opción. No insistas por favor.
—Está bien, lo siento. Solo me haces falta. Come mejor y cuídate más por favor. Te quiero.
Cuando estoy por soltar el teléfono, me llega un WhatsApp de un número desconocido.
—Este es mi número personal, por cualquier emergencia. Supero la semana de prueba así que de todas maneras lo iba a necesitar. Procure descansar. Buenas noches señorita Brown.
¡Es Matthew! ¿Por qué decide pasarme su número justo ahora? Y otra vez, ¿Por qué sabe mi número? Me pregunto a que se refiere con eso de por cualquier emergencia ¿personal? ¿si me vuelvo a desmayar? Sacudo ligeramente la cabeza, no puede ser por eso, no le debe importar mucho lo que pase con mi vida. Seguro se refiere al trabajo.
Como no me esperaba su mensaje, no sé que responder así que solo guardo el número. Pero, por supuesto, con la poca paciencia que tiene, me mando otro.
—Es de mal gusto no responder, especialmente si el que le escribe es su jefe.
Por favor ¡Que impaciente es!
—Estaba por responderle, señor. ya agendé su número. Buenas Noches.
Ahora es el quien lee el mensaje y no escribe mas nada. Claro, siempre tiene que ganar el.
Intento dejar de pensar en él y aun con el cansancio que tengo, me levanto para darme una ducha para ver si puedo descansar mejor. Cuando por fin me puedo acostar es como si estuviera en el cielo. Pienso en lo que paso hoy y me pregunto si el lunes será más incómodo de lo normal el trabajo. No es que espere que mi jefe me trate ahora diferente de todas maneras.
Después de pasar toda la tarde cocinando una lasaña, para intentar subirle el animo a Eric que últimamente esta de un humor de perros insoportable, decide hacer acto de presencia en la cocina.
—¿Esta lista la comida o pretendes que me muera de hambre?
Estaba encerrado en nuestra habitación con la televisión a todo volumen. Por supuesto, estaba tomando y ahora tiene los ojos rojos.
—Eric, tengo rato llamándote y no me prestas atención.
—Estaba viendo el partido, pero tú siempre eres inoportuna.
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No me dejes caer; Escondida.
RomanceNina Johnson, una mujer de 26 años que después de que su ex abusa física y psicologicamente, se ve envuelta en una desgracia y decide dejar todo atrás, cambiarse el apellido y mudarse de país. Matthew Reed, un empresario exitoso, con un carácter d...