Menos mal que había desayunado gracias a mi querida y amada Estela, esperaba anciosa por mi pedido, se me hacía agua la boca de solo pensar en la torta de fresa, soy tan fánatica de todo lo de chocolate y fresas, lo dulce me encanta. Volteaba a los lados a ver si veía a Will, se sentía tan lindo tener ganas de ver a alguien, que tu corazón palpite a millón de tan solo pesar que lo veras de nuevo, te sientes en otra parte, no quisieras que el momento acabe, que los mínutos se hicieran eternos cuando lograr verlo y poder tan solo hablarle.
Yo no sabía que me sucedía en pocas palabras con él, porque solo llevaba 2 días conociendole, pero me gusto desde el momento en el cual esa silla se volteo, en el momento en el que sus ojos azules claros chocaron con los míos, no pude describir la fuerte corriente de emociones que sentí, porque su risa, su caballerosidad no la había conocido de ningún otro chico jamás, y es increíble que alguien como el se fije en una chica tan corriente y común como yo.
Por fin trajeron mi chocolate y mi torta, la observe con alegría, parecía niña pequeña al disfrutar de su dulce favorito, por leves momentos alzaba mis ojos para poder ver si el se encontraba allí, pero no estaba, me desilucione un poco, seguía provando pequeñas porciones de mi torta y miraba hacia la ventana para ver hacia la ciudad.
de repente sentí una voz sexy, gruesa y seductora que me hablaba, esa voz que me sacaba de mi zona de confort, estaba ya nerviosa, mi corazón saltaba, calma Alessia, manten la calma el subconsciente trataba de tomar el control, cuando me volteo a ver, estaba allí, tan perfectamente vestido, de negro y su bendita semi cresta que me volvía loca.
- Buenas tardes Señorita Alessia.- Me ve sonriente y muerde su labio inferior.
- Hola, buenas tardes Sr Collins.- Volví a sonreírle, pensando por dentro lo perfecto que se veía hoy, o sencillamente como todos los días.
- Me permite?.-Añade Will._ No dejaba de observarme con mirada impasiva.
- Por supuesto.- Me acomode y me senté erguida viéndolo.
- Durmió bien anoche?, ya su auto está en casa, y sus amigos están bien, logro hablar con ellos?.- Revisaba su celular mientras me conversaba.
- Si dormí bien, muchas gracias,y aún no.
- Perfecto, como sigue la Señorita Writh?.- Guarda el celular y se queda viéndome fijo.
- Está bien, salio hacer unas cosas.- Comía otro bocado de mi torta.- Llama a la camarera y le hace un pedido.
- Por favor me trae un jugo de pera, y un cóctel de frutas, por favor que traiga frambuesa, más que todo.- Ríe y luego me observa.
- En seguida Sr Collins.- Se da media vuelta y se va.
- Y usted que hará hoy Señorita?.- Se toma por las manos y me ve sin perder sus ojos.
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Tan solo mía
Ficção AdolescenteTenerte, siempre, de ahora en adelante, y para la eternidad. Aventurate a leerla.