Tan solo mía

Subimos a la recamara, me duche, cambie de ropa y puse mi pijama la misma rutina de siempre, Estela se fue está vez a su recamara, me metí a la cama buscando mi cobertón, y caí en un sueño profundo.

A la mañana, desperte, me senté en la cama, y me puse a pensar en Will, espero que el doctor nos de buenas noticias, que esté bien y que la enfermedad no esté aumentando tanto, Estela ya se sentía abajo, que estará preparando de desayuno, desperte y erán las 7, teníamos cita a las 9 no podía quedarme tanto tiempo, iríamos a Wellspring clinic for Hilistic Medicine, el doctor Dubrow nos esperaría, me metí a duchar enseguida para que si Will llegara me encontrara lista, busque mi pantalón talla alta negro, mi camisa fucsia sencilla, zapatillas negras y peine, me volví a echar mi pintura roja en ambos labios.

Me mire una vez más al espejo y baje ya lista, tome el monedero, y fui directamente a la cocina, Estela se encontraba allí tomando café.

- Que temprano, irás a la clínica.- Me mira mientras toma un sorbo de café.

- Sí, ya Will debe venir cerca, espero todo salga bien.- Suspire y la observe, me serví un poco de café.

- Hay emparedados Alessia, están allí en la taza y jugo de manzana, desayuna algo, todo saldrá bien.- Ríe.

- Tomaré café mejor.- Reí y tome dos emparedados, mientras comía a los mínutos escucho la puerta, Estela se levanta y va enseguida a abrir.

Espere, ya había llegado mi gallardo príncipe.

- Hola, buen día, buen apetito, estás lista?.- Me observa con mirada radiante como la de siempre y ríe.

- Hola, gracias, lo estoy.- Sonreí, termine de comer, fregue el plato y lave mis manos.

- Vale, vamos.- Me espera, estaba precioso con su traje de empresario como siempre.

- Adiós, regreso ahora, me escribes si salirás para saber.- Reí.

- Adiós, que les vaya bien, vale lo haré.- Sonríe.

Salimos y Reik nos esperaba, me dio pase a mi primero, se montó el y el auto arranco, unos cuantos kilométros, esperaba algo nerviosa por saber si todo saldría totalmente bien, eso esperaba, me tomo por la mano, le observe sonrío y me obsequio un lindo beso en los labios, tener su respiración tan de cerca, tenerlo me hacía feliz.

A las horas sin darnos cuenta llegamos, Reik se estaciono, se bajo, abrió la puerta de Will, salío y me dio la mano a mi, vamos camino a la clínica y todos lo conocían, que popular era esté hombre.caminamos y fuimos a recepción.

- Buenos días Sr Collins, el Doctor Dubrow ya lo atiende.- Ríe.

- Perfecto, gracias.

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