Schiavus [Boku no Hero Academia]

Capítulo 51: Este reino no necesita dos reyes.

—Oye —introdujo Kirishima mientras masticaba para después tragar—. ¿Cómo os conocisteis? —inquirió con cierta curiosidad.

—Oh, ¿cómo nos conocimos...? —repitió Denki con una leve sonrisa y cierta nostalgia.

[...]

—¡Nosotros seremos tus amigos! —exclamó Kaminari con una sonrisa mientras Tsuyu no podía reprimir las lágrimas que habían comenzado a caer.

—Eso mismo —agregó Jirou empezando a sentirse más cómoda y acostumbrándose a aquel abrazo.

[...]

POV Kaminari Denki

—¡Algo así...! —finalicé después de haber recordado ciertos momentos y hablado sobre cómo, al menos, Tsuyu y yo nos conocimos.

Ambos evitamos sacar ciertos temas y decidimos no contar detalles desagradables.

Simplemente le dije a Kirishima que había una chica más con nosotros a la que quería como mi propia hermana y que cuando estábamos en el calabozo hubo un pequeño problema y Tsuyu nos ayudó. De ahí comenzamos a estar juntos todo el rato hasta que conocimos a los demás...

POV Narradora

—¡Entiendo! —respondió Eijirou; parecía interesado en detalles que se había dado cuenta que Asui y Denki habían suprimido, pero optó por no sacar el tema supusiendo que sería algo más personal.

Porque él también tenía su propio pasado.

Kirishima también tenía recuerdos que no quería volver a mencionar. Que prefería olvidar... que prefería superarlos.

—En fin... —murmuró Denki para después bostezar y parpadear varias veces con cansancio.

Los tres habían terminado de comer y solo estaban alrededor de la fogata conversando. Ya había anochecido hacía un buen rato.

—¿Dormimos? —inquirió Asui al ver cómo Kaminari había comenzado a cerrar los ojos y abrirlos haciendo el esfuerzo en vano de mantenerse despierto—. Kaminari siempre ha sido un dormilón.

—Ya lo veo —respondió el pelirrojo con una sonrisa al contemplar cómo su schiavu había inclinado, inconscientemente y levemente, la cabeza hacia un lado—. Kaminari —llamó acercándose hacia el rubio y sentándose a su lado—. Vamos a dorm...

Pero Eijirou no pudo terminar de hablar al sentir cómo Denki apoyaba la cabeza en su hombro mientras su brazo era rodeado por las manos de un, ahora, dormido Kaminari.

—Vaya —comentó Tsuyu con un dedo en su labio inferior.

Kirishima estaba rojo.

Rojísimo.

Aquel gesto por parte de Kaminari le había pillado desprevenido. El cómo su schiavu se estaba aferrando a su brazo mientras mantenía su cabeza apoyada y los ojos cerrados... le hacía perder la cordura.

—Kirishima... —murmuraba Denki entre sueños, con una leve sonrisa y echando baba—, hamburguesas...

Eijirou no quería moverse. Mejor dicho, no tenía pensado ir a ninguna parte.

—Tsuyu... adelántate... —dijo nervioso y mirando hacia otro lado para no dejar ver su rostro totalmente sonrojado.

—Sip —confirmó la joven con cierta alegría y dispuesta a volver a la cabaña de Kirishima para descansar.

"Me alegra saber que Kaminari será feliz."

[...]

Había amanecido y, en el palacio, los reyes se hallaban tratando un tema que a Shigaraki se le había ocurrido después de ver la desesperación de Katsuki por la muerte de su madre.