Capítulo 79: Por ti, haré lo que sea.

1.4K 259 97
                                    

—Son simples objetos. Basura inservible y aburrida.

—¿No te parece que es importante deshacerse de la basura?

Ante aquella pregunta, Chisaki se giró para mirarle a los ojos, dándole a entender que, efectivamente, le parecía bien.

Que no vendría mal hacer una limpieza en el reino.
Que sería genial deshacerse de toda aquella escoria.

[...]

POV Kirishima Eijirou

Habíamos regresado a casa para comer algo y, una vez con el estómago lleno, volver al pueblo con un único objetivo en mente; buscar a Uraraka.

Varias trampas que habíamos puesto tenían algún animal muerto, por lo que no tardaríamos tanto en preparar la comida.

—¡Kaminari! —llamé con una sonrisa a mi schiavu—. ¿Puedes encender una hoguera?

—¡Claro! —aceptó con entusiasmo, devolviéndome la sonrisa y provocándome, nuevamente, esa gran calidez en el pecho.

"En algún momento... tendré que decírselo."

Poder estar con Kaminari me hacía feliz. Muy feliz. Y, con el tiempo, el sentimiento se había fortalecido más de lo que pensaba. Quería tanto a Kaminari que, a estas alturas, no podía imaginarme una vida sin él.

Lo único que deseaba era poder estar con él para siempre. Me daba igual si estos sentimientos no eran correspondidos; simplemente quería verle feliz. Ver esa característica sonrisa y vivir juntos.

—¡Tsuyu! ¿Me ayudas con esto? —agregué, cargando el cervatillo que prepararíamos.

—¡Sip! —respondió, dirigiéndose a nuestra choza para ir a por algunos utensilios para rasgar la piel del animal.

Con el tiempo nos habíamos acostumbrado a hacerlo así. Kaminari se encargaba del fuego mientras que Tsuyu y yo preparábamos la carne.

Principalmente la razón era que a ella se le daba bastante bien esa labor, pero, en realidad, yo prefería que fuera así por el simple hecho de que si fuese Kaminari el que tuviera que hacerlo conmigo no podría evitar ponerme nervioso ante su mirada y cercanía. Demasiado. A tal punto de posiblemente arruinar la carne por completo.

Además, cuando Kaminari lo intentó varias veces, también destrozó toda la carne con la excusa de que aquel cuchillo no cortaba bien.

Básicamente no podíamos hacerlo juntos porque nos quedábamos sin comida.

—¡Kirishima, misión cumplida! —presumió con ilusión y alegría, mostrando la hoguera que había encendido; con el tiempo cada vez lo hacía más rápido.

—¡Genial! —respondí, alegrándome al verle tan contento.

"Tengo que decírselo."

Me repetía lo mismo constantemente. No sabía cuánto tiempo más podría seguir intentando reprimir lo que sentía por él.

Pero nunca encontraba el momento oportuno.

"¿Por qué será tan difícil?"

En ocasiones me preguntaba qué consejos me daría Ashido para esta situación. Sus consejos siempre habían sido los mejores.

"Ella sabría qué decir."

Nuevamente estaba recordando el día en el que, por mi culpa, tuvo que irse. El día en el que con mis propios ojos la abandoné y no hice nada para evitarlo.

—Oye, Kirishima.

"Seguramente sigo siendo tan cobarde como aquella vez."

—¡Kirishima!

No pude ayudarle. No supe cómo reaccionar al ver su cuerpo ensangrentado; al ver cómo escupía sangre y se intentaba incorporar en vano.

—¡KI-RI-SHI-MA!

La voz de Kaminari llamándome me hizo reaccionar, sacándome de aquellos dolorosos recuerdos y haciendo que me centrara en el presente; en lo que, ahora, de verdad importaba.

—¿Otra vez soñando despierto? —comentó con una leve sonrisa y arqueando una ceja.

—¡Ah, sí! ¡Perdonad! —respondí algo nervioso, dándome cuenta de que Tsuyu ya había terminado su parte y yo no iba ni por la mitad de la mía.

—¿Sigues preocupado por lo de Uraraka? —añadió, cambiando su expresión a una más triste.

—Dijiste que todo iba a ir bien —se unió Tsuyu con una leve y triste sonrisa; parecía estar intentando mantener la esperanza, pero se notaba que, en el fondo, cada segundo que pasaba le hacía sentirse peor.

"Es verdad. No tengo tiempo para pensar en otras cosas."

—¡Tenéis razón! —reaccioné, haciendo el esfuerzo de olvidar todo el pasado y continuando mi labor de seguir despellejando nuestro almuerzo—.  ¡Comamos y a buscar a Uraraka!

[...]

POV Uraraka Ochako

No entendía por qué. Mi cuerpo reaccionaba por instinto. No sabía por qué al ver a Izuku tan de cerca, al ver a un amigo de tantos años, sentía la necesidad de alejarme.

Tenía... miedo. Mi cuerpo temblaba más de lo debido y lo único que podía hacer para tranquilizarme era aferrarme aún más fuerte a Himiko.

Ella me había salvado. Todo lo hacía por mí y no quería hacerme daño. Me había prometido muchas cosas. Había jurado que no me iba a ocurrir nada malo. Que podía llegar a recuperarme. Que podría sonreír de nuevo.

—Bueno, querida Ochako... —su aguda voz al llamarme me tranquilizaba—. ¿Tienes hambre? ¿Qué te apetece comer? No es bueno que tomes los medicamentos con el estómago vacío.

En poco tiempo ella me había aportado confianza. Siempre era su prioridad. Le importaban mis deseos. Decía que haría cualquier cosa por mí y que... se quedaría a mi lado para siempre.

No podía sentir otra cosa que no fuese calidez al estar con ella.

—Gracias —murmuré en voz baja, sin soltar su ropa y acercándome aún más a ella—. Gracias por ayudarle.

—No te preocupes, Ochako —respondió, nuevamente con una amable sonrisa que me proporcionaba tranquilidad—. Ya te he dicho que por ti, haré lo que sea.

[...]

Schiavus [Boku no Hero Academia]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora