—¿Quién es esa perra, Neymar? —le gritaba su novia Bruna alterada por llamada teléfonica. Neymar negaba con la cabeza mientras veía las revistas ¿Como pudo ser tan estúpido?
—Mi amor, es la hija de maradona, yo solo la estaba ayudando se cayo al lago y se estaba ahogando y bueno, yo la ayude y ya pero no tengo nada que ver con ella, lo juro —rogó una vez más.
—¿Por qué será que no te creo? ¡Neymar, demonios! ¿Me engañas con la tipa que hablo mal de mi? No te creí capaz —dijo mientrás sollozaba, Neymar inmediatamente se le agitó el corazón.
—Mi princesa, eres la luz de mis ojos aparte de mi hijo nunca te engañaría, eres lo mejor que ha pasado en mi vida y te amo bebe —dijo rápidamente.
—¿Aparte de tu hijo? ¡Eres un imbécil, lo quieres más a el que a mi! —gritó. Neymar puso los ojos en blancos y suspiró pesadamente.
—Bruna no discutiré esto contigo —se resigno, sabía que debía haber defendido a su hijo pero no quería hacerla molestar más.
—Ni siquiera lo niegas —gruño— hablamos después.
—Pero Bruna... —y se escuchó el pi pi. Neymar se tiró en el sillón de la sala de juegos del equipo de Brasil y vió a su hijo jugar en el suelo con sus juguetes.
El nunca dejaría de amar a su hijo, el aún era pequeño, tenía 3 años y Carolina era una excelente madre y amiga pero a veces pensaba ¿Por qué Bruna no quería a su hijo? ¿Por qué no lo aceptaba? ¿Por qué lo odia? Que tan duro puede ser esto, la persona que amas ni siquiera tolera a la persona que también amas y que siempre amarás.
Por otro lado estaba furioso con lo respecto a _____ y las revistas, que locura pero debió admitir que esa chica que era tan bella con sus ravietas, malas palabras y su mal humor, era hermosa, suponía que siempre era así y que trataba siempre mal a los de servicio y se creía la dueña del mundo, Bruna es así pero no era el caso. Pero ahora por un juego, el saldría perdiendo.
—¿Quieres comer, hijo? —el se negó— ¿por qué?
—Estoy ocupado —Neymar río y lo agarró entre sus brazos y lo sentó en sus piernas— Oye, bájame —río.
—¿Que jugabas?
—A que mis juguetes eran futbolistas como tu —Neymar sonrío ampliamente.
—¿Ah si? ¿A tus juguetes les gusta el futbol? —su pequeño asintió.
—Si y mucho al igual que a mi —el pequeño sonrío— cuando sea grande quiero ser el mejor futbolista del mundo así como tu papi, tu eres el mejor futbolista de todo el universo —e hizo una seña con sus manos. Neymar pudo sentir como sus ojos se humedecieron al escuchar esas palabras de la adoración de su vida.
—Te amo hijo y seguró que lo serás, se que si —su hijo lo abrazo emocionado y en ese momento entro Marcelo.
—Neymar —llamó su atención y Neymar volteo a verlo aún con su bebe en brazos.
—¿Que sucede?
—Alguien te busca y no creo que sea buena la visita —se veía preocupado. Neymar se alertó y dejo a David en el suelo junto a sus juguetes y se levantó de su asiento.
—¿Quien es? —dijo mientras se quedaba parado.
—Ya lo verás —hizo una mueca y volvió a salir. En unos segundos se escucharon las pisadas de unos tacones dirigirse a la puerta y hasta que apareció esa persona, ______ Maradona, el se quedo congelado, no lo esperaba. Imaginen si antes estaba molesta, tienen que verle la cara ahora, si tuviera una pistola no dudaría en matar a alguien en ese momento.
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La hija de Maradona {Neymar y tú}
Teen FictionAmbos se odian. Ambos han sufrido lo suficiente. Se conocieron y ambos pusieron sus mundos de cabeza.