--de acuerdo --accedió ella sin hacer ninguna mension a lo otro --nos vemos en media hora.
--te estaré esperando.
Colgó antes de caer en la tentación de añadir un"te quiero "o cualquier otra frase que pueda espantarla. Fernando se guardó el móvil y le dio rabia sentirse tan inseguro. Él quería ser comprensivo, pero al mismo tiempo no podía quitarse de encima la sensación de que, mientras él se había entregado por completo, ella seguía manteniendo algo a distancia. <<son imaginaciones tuyas >>se dijo, <<hace demasiadas semanas que duermes poco y te estás volviendo paranoico. Lucero está contigo, así que relájate >>.
Sacudió la cabeza y caminó con pasos desididos hacia el restaurante. Llegó al Peper Moom y el propietario salió a saludarlo. Tras una breve conversación de cortesía el hombre le aseguró que tendría una mesa lista en cuestión de minutos y lo invitó a tomarse una copa en la barra mientras esperaba. Fernando aceptó la invitación y se sentó en un taburete Para esperar a Lucero. Pidió un whisky, y un recuerdo voló a esa noche semanas atrás, cuando la vio con aquel vestido que dejaba la espalda al aire, y lo bebió despacio.--hombre, fer, no esperaba verte aquí. --lo saludo Quin cogiendolo por sorpresa --hace semanas no sé nada de ti.
--eh estado ocupado --contestó Fernando --¿y tu? ¿No te ibas de viaje con patricia?
--si, volvimos hace unos días --en aquel preciso instante apareció la esposa de Quin --patricia, cariño, Fernando está aquí.
--hola Fernando --le dio un beso en la mejilla --¿has venido a cenar solo?
--no, estoy esperando a...
--mira quien está aquí --la frase de Quin impidió que Fernando terminase lo que iba a decir--que casualidad encontrarte aquí Lucero --Quin se acercó a Lucero, que acababa de cruzar la puerta y añadió --me enteré lo de tim. No sabes cuanto lo siento.
Fernando se puso de pie desidido a dejar las cosas claras, pero las siguientes palabras de Lucero lo dejaron helado.
--no te preocupes Quin. Me alegro de volver a verte, y a ti también colunga.
¿Lo estaba saludando como si las cosas entre ellos no hubiese cambiado? ¿Por qué? Tragó saliva y asintió.
--¿estas bien Lucero? --le preguntó patricia mirándola a la cara --estas un poco palida.
--si, solo estoy cansada.
--¿has quedado aquí con alguien? --patricia siguió hablando con ella.
--no, los eh visto pasar y eh entrado a saludar.
Fernando iba a ponerse a gritar en cualquier momento y la miró a los ojos para advertirselo. Él había accedido a no contárselo a Tim hasta que volviese de París, pero no a convertir su relación en un sucio secreto.
Y así era como se sentía ahora, como si lo que estaban haciendo estuviera mal. Y no pudo soportarlo.--¿y tu fer, estas esperando a alguien?
--eso creía --dijo entre dientes --pero al parecer me eh equivocado --dijo sin dejar de mirar a Lucero.
--¿por qué no se quedan a cenar con nosotros? --los invitó patricia.
--no, yo...
--vamos Lucero, tengo ganas de hablar contigo --insistió patricia --y de seguro que Fernando y Quin sabrán distraerse hablando del equipo.
--¿que me dices Fernando, te quedas?
Él esperó a que Lucero dijese algo ¿de verdad iba a fingir que no eran nada?
--no se patricia. No quiero molestar, y la verdad es que estoy cansada.
Sí, iba a seguir fingiendo. Fernando dudaba entre largarse o ponerse a beber como loco.
--tu no molestas cielo --le dijo Quin --y la verdad es que me gustaría hablar con Fernando. Quédensen a cenar. Vamos no se hagan rogar.
--de acuerdo --accedió Lucero.
--por mi perfecto --dijo Fernando y dejó la copa en la barra después de vaciarla.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Chicas aquí es donde el mundo se entromete en su relación 😧.
Veremos que sucede en esta cena y como son capaces de resolver este pequeño problema
ESTÁS LEYENDO
Las reglas del juego #LC
RomanceLucero Hogaza tiene la vida perfectamente planeada y está a punto de conseguir lo que quiere : va a tener su propio programa de noticias económicas y en dos meses va a casarse con un hombre maravilloso. Pero una noche Tim cancela la boda y la abando...