La habitación estaba oscura y, aparentemente, vacía. Se suponía que era un antiguo almacén al que nadie decidió dar uso. Apenas había dos muebles en condiciones de ser usados o tan siquiera en condiciones de ser mostrados. Las paredes estaban viejas, y la pintura (que seguramente en su día debió de ser de un bonito color blanco) estaba completamente corroída por el moho y los agujeros que alojarían a las ratas.
Elaine solo buscaba un lugar donde...¿esconderse? ¿Era apropiado hablar de Sicheng así, como si fuera un vulgar criminal del que debía esconderse?
Pero en cualquier caso, si, Elaine simplemente buscaba un lugar donde poder esconderse de él. Corría desesperada en busca de algún recoveco donde poder meterse durante unas horas sin ser vista.Claro que, haberse metido en un lugar cerrado para huir tal vez no había sido la mejor idea que había tenido en mucho tiempo. Pero desde luego tampoco era la peor. Elaine tenía claro cuál había sido la peor decisión de su vida.
Al final del sótano encontró algunas cajas amontonadas y decidió esconderse entre ellas. De todas formas, no había más sitios, y salir de allí ya no era una opción. Aunque nadie la hubiera visto entrar allí, los hombres de Sicheng ya estarían buscando en todas partes, así que tratar de escapar del recinto en general, hubiera sido, en pocas palabras, un suicidio.
Elaine llevaría alrededor de hora y media detrás de aquellas cajas, esperando algún ruido o movimiento. Por el contrario, lo único que se oía en aquella habitación era su agitada respiración y el movimiento de algún roedor.
Elaine conocía bien a Sicheng, sabia que en algún momento él se cansaría de buscarla, y en ese momento, ella tendría vía libre para huir.
- ¡Pillada!- Elaine se congelo ante aquel grito. Alguien le habia encontrado. Pero, por desgracia, no era "alguien", era él.
-Sicheng...Por favor, sólo déjame ir...- ella estaba al borde de las lágrimas, y se había lanzado hacia los pies del joven, implorando clemencia por su vida.
-Elaine, ¿acaso no te enseñe bien, eh? En tan solo un acto has incumplido tantas normas y saltado tantas lecciones...- él comenzó a chistar con la lengua, mientras ella solo lloraba a los pies de la misma parca.- Levántate.
Elaine se levanto, aún llorando, y con la mirada fija en el suelo. Era incapaz de mirarle a los ojos.
- ¿Sabes lo que les pasa a los que saben demasiado? Si, ¿verdad? Por eso has venido aquí en un vano intento de salvar tu vida.
Elaine levanto la mirada y se encontró con el semblante serio de Sicheng. El joven llevaba un largo abrigo negro, que impedía ver lo que llevaba puesto (como era habitual en él). Pero había algo que le resultó curioso.
Siendo Sicheng, Elaine pensó que cuando le encontraran, al menos iría acompañado de dos o tres de sus hombres. Pero iba solo.- Ah, si. He decidido venir solo, ¿sorprendida? Realmente no deberías estarlo, nunca se sabe por donde voy a salir.
- Por favor, déjame irme. No diré nada, me iré del pais si quieres. Pero...- Elaine callo cuando Sicheng comenzó a reírse.
- ¿Irte? Y además del país. Guau, no creía que me tomabas por imbecil, pero parece ser que si, ¿no?.
-No, claro que no. Se guardar secretos, no diré nada. Lo juro. Pero por favor...
- Me dices- Sicheng le cortó, cambiando a un semblante mucho más serio.- que debo confiar en ti, cuando estás rogando por tu vida. Pidiéndome clemencia, dispuesta a abandonarlo todo por tu vida. ¿Es acaso tu vida más importante que la mía? ¿Es acaso tu vida más importante que todo lo que sabes? ¿Crees que voy a permitirme el lujo de dejarte ir, aún sabiendo las atrocidades que todo lo que sabes podría causar? Si eso no es tomarme por un imbecil, dime Elaine, ¿que es entonces?
Elaine no supo que responder. Ella solo quería vivir.
-¿Que es Elaine? Dime.
- Confianza.-Elaine alzo la mirada directamente a los ojos de Sicheng-Tenia confianza de que me quisieras como yo a ti, y de que me dejarás ir. Eso es lo que es.
Si el semblante de Sicheng estaba serio antes, ahora asustaba mirarle a los ojos. Elaine aparto la mirada de él y la volvió a posar en el suelo.
- Ya no se si me tomas por imbecil o te tomas a ti por necia. Creo que no te has dado cuenta todavía. Déjame explicártelo- se acercó a ella hasta quedar casi frente a frente, y luego se posicionó detrás de ella, justo detrás de su oreja.- El Boss no se enamora, el Boss atrapa-Sicheng posó una mano en su hombro-, utiliza- luego le posó un suave beso en la mejilla- y olvida.
Sicheng se alejó de ella. Elaine tomo eso como un pistoletazo de salida, que tal vez era libre. Salió corriendo hacia la puerta, pero antes de salir oyó algo.
"Atrapa, utiliza y olvida"
Se giró para ver qué había sido aquello, y se encogió ante la horripilante escena de Sicheng riéndose mientras sostenía una pistola apuntando directamente hacia ella.
Elaine dejo escapar un chillido, buscando ayuda o alguien que la socorriera.
Sicheng disparó el arma, y el cuerpo de la joven cayó causando un ruido seco. El lugar se llenó de silencio, y después de un rato, algunos hombres entraron al lugar.
-Limpiad todo esto, ya sabréis como- Sicheng abandonó el lugar luego de ordenar a sus hombres lo que debían de hacer con Elaine.