This Love [n.h y __.g] 3ra tem de Aventuras.

063: Dia de cama.

Suspiro desganada y me tiro a la cama, fue un día demaciado largo y ya es más de media noche.
Miro hacia el techo de la habitación e inalo un poco de aire para después soltarla lentamente.

¿Por que decidí diseñar todo yo? Me levanto con peresa y comienzo a quitarme la ropa, ya deseo estar entre las sabanas, con la cabeza en la almohada y relajando mi cuerpo.

Niall entra en la habitación, con su guitarra en la mano. Tiene algo de ojeras pero aún así me sonrie.
Acomodo mi ropa sobre una cajonera y cuando me doy vuelta, el también se está quitando la ropa.

—¿Cansada?

—Agotada... -Respondo mientras me meto a la cama.

Cuando apoyo la cabeza en la almohada, siento como todo el cuerpo se relaja. Gimo complacida de tanta comodidad, Niall hace lo mismo. Me acomodo de costado para mirarlo de frente y el hace lo mismo.

—Estoy derrotada. -Exclamo en un quejido.

El esboza una pequeña sonrisa y busca una de mis manos debajo de la sabana para entrelazarla con la suya.

—Podría ser peor.

—Lo se.

Ambos nos miramos en silencio, ya no me pesan los ojos y parece que el sueño desapareció.
Un silencio relajante llena la habitación, nos acercamos más para acurrucarnos tranquilos y recuesto mi cabeza sobre su pecho, pasando mi brazo izquierdo sobre el y metiendo mi pierna entre las suyas, el besa mi frente tiernamente.

—En Capitol están felices de que vuelva a Los Ángeles.

Dejo un beso sobre su pecho y sonrio. —Me alegra.

Se aferró más a mi abrazandome fuerte, sonreí en su pecho sintiendo el aroma de su colonia.

—Ay, te quiero tanto... -Dije en un murmulllo sobre su pecho. Sus pelitos estaban haciéndome cosquillas y levante un poco la cara para mirarlo a los ojos, el sonrió. —¿Y si te afeito el pecho?

Comenzo a reír pensando que era una broma, pero me mantuve mirándolo de la misma manera. —¿Es enserio?

Asenti mordiendo mi labio y el comenzo a reír de nuevo.
Sus mejillas marcadas y sus ojos chinitos me recordaron a la primera vez que lo vi sonreír.

—Ni loco.

Ahora se soltó de mi y se acostó de lado con la cabeza apoyada en su brazo.

—Probememos...

Se negó otra vez con un movimiento de cabeza y me sonrie acercándome otra vez a el. —Cielo, no...

—Esta bien... No lo haremos.

Escuche como suspiro de alivio y me rei un poco. Miro su rostro una vez más mientras cerraba los ojos...

—Pero debemos quitarte la argolla de la oreja.

—¿Que?

Abrió los ojos de golpe me miro un poco desde arriba, su mini papada se marco un poco. —¿Por que me lo tengo que quitar?

—Hace un año desde que te lo pusiste y te lo limpias poco... Cuando te bañar debes sacartelo o ¿Todavia te duele?

—Obviamente no.

Su cara es decir, se que debe pensar que bromeo pero esto es totalmente sincero. Me da un beso en los labios y no se aleja mucho, el esta más cansado que yo, asique se duerme así.

(...)

Me despierto escuchandolo cantar y en cuanto abro los ojos lo veo sentado en la cama a mi lado con el celular en una mano, la otra me abraza a mi.
Me acomodo de apoco a su lado mientras me voy estirando, el me sonrie y besa la mejilla.

—Buen día...-Murmura sonriente.

Su cabello castaño esta hacia cualquier lado y su barba próxima a seguir creciendo se nota más hoy con la luz del sol. Hago su celular a un lado y me subo sobre el para abrazarlo como un coala, lo cual el acompaña abrazandome fuerte por la cintura y dejando un lindo beso en mi hombro izquierdo.

—Buen día... -Esta vez hablo yo y puedo sentir su sonrisa sobre mi hombro.

Siento que me suelta de un brazo y escucho que enciende la tv, donde coloca música y Smooth Sailin' de Leon Bridges comienza a escucharse.
Me abraza un poco más fuerte para tirarme sobre la cama y ahora es el que esta arriba.

Me río cuando se levanta un poco para ver mi cara. —Que precioso humor el de hoy...

Sonrio mirándole los ojos y beso sus labios lentamente. —¿Podriamos salir a desayunar?

Mi sugerencia al parecer no le pareció positiva y se dejo caer por completo sobre mi soltando un poco de aire.

—¿Y si nos quedamos todo el día en la cama? -Su pregunta fue acompañada de un suave quejido.

Sonreí en su hombro para luego depositar un beso ahí, me quedé en silencio disfrutando el momento, sin soltar mi agarre de el el.

La canción cambio y comenzó a sonar Play Date de Mélanie Martínez. Comencé a acariciar su espalda y después su suave cabello, dejando descansar mi mano sobre el con los dedos entrelazados entre sus mechones.

—Quiero estar así toda la tarde... -Murmura sobre mi hombro, haciendo que mis piernas se presionen más a su cintura.

No se en que momento se levantó un poco y comenzó acariciar mi cara, sonriendo con la boca cerrada y mirándome atentamente.

Siento que el tiempo se pasa lento cuando comienza a dejar lentos besos sobre mis labios y por último una suave mordida.

—Quiero desayunar.

Rompo el momento haciéndolo reír sobre mis labios. Pero contrario a mis palabras que sugieren salir de la cama, mis piernas y mis brazos no se despegan de el.
Es así cuando el se sienta en la cama, apaga la musica, para luego levantarse y me lleva con el sin soltar mi agarre. Sale de la habitación y no puedo evitar que una carcajada salga de mi boca. Baja las escaleras con cuidado y nos reímos cuando casi caemos en los últimos escalones.
Atraviesa la sala y el comedor hasta llegar a la cocina y dejarme sentada sobre la isleta sintiendo el frío mármol bajo mi trasero.

Toma un delantal que nunca usamos y se lo coloca sobre su torso desnudo.
Lo veo como saca huevos de la nevera, tomate y para ponerse a cocinar en un sartén.

—Vas a comer el mejor desayuno del mundo... -Dice cuando se da la vuelta para encender la cafetera.

Y así es como me quedo admirando lo mientras el cocina.